Tribunales.-Agentes que investigaron el asesinato de los dos guardias civiles rechazan la versión de 'El Solitario'

Actualizado: miércoles, 16 julio 2008 21:26

Otra testigo protegida afirma que se encontró en una carretera con Jaime Giménez Arbe el día que fueron asesinados los dos guardias civiles

PAMPLONA, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -

Un agente de la Guardia Civil que participó en la investigación para detener al atracador Jaime Giménez Arbe afirmó hoy que no hay "ningún elemento" que avale la versión ofrecida por 'El Solitario' sobre la participación de una tercera persona en el asesinato de los dos guardias civiles en Castejón.

El agente, que fue secretario de la investigación, afirmó en la segunda sesión del juicio contra Giménez Arbe que "todo indica que los elementos que hemos investigado son los que estaban en Castejón el 9 de junio de 2004", cuando fueron asesinados dos guardias civiles, y consideró que, "en un hecho que puede ser accidental, y sorprendido por la guardia civil, - el acusado- no tuvo más remedio que disparar para no ser sorprendido con sus armas y con sus elementos de caracterización".

"No vemos ningún elemento que implique que una tercera persona hubiera estado implicada en los hechos, la versión es totalmente ilógica", indicó, sobre la teoría de Giménez Arbe de que el autor del asesinato fue un ciudadano corso que circulaba con un vehículo Suzuki con armas desde alguna zona de Álava hasta Zaragoza, donde debía entregar ese vehículo a 'El Solitario'. Explicó, por ejemplo, que ese supuesto autor de los hechos, no tendría porque desviarse por Navarra para llegar a Zaragoza. "A Zaragoza se va recto, no tiene que desviarse, no encaja en la versión", dijo.

Otro agente de la Guardia Civil destinado en Navarra, que también participó en la investigación, consideró "descabellada" la versión ofrecida por 'El Solitario". "No sé nada de eso. No tengo ni idea de ese tema", añadió.

El secretario de la investigación explicó que el hecho de que ningún testigo viera a Giménez Arbe entre las 18 y las 21 horas del día de los hechos "encaja perfectamente con su forma de actuar" y consideró que "pudo estar camuflado en las Bardenas Reales".

También destacó el agente de la Guardia Civil que en el domicilio de 'El Solitario' fueron hallados cuadernos en los que se recogían "rutas de huida" de los atracos que supuestamente cometió. Así, había rutas de Toro, Portugal, Alfaro y de diversas zonas de Navarra, entre ellas, la de Castejón. "Esas rutas eran planeadas para huir del lugar de los hechos a través de vías secundarias que no eran importantes", explicó, para asegurar que 'El Solitario' conocía la zona en la que se cometió el asesinato.

El agente explicó que, una vez cometidos los crímenes, la Guardia Civil consideró que el autor de estos hechos era el mismo que había cometido múltiples atracos con anterioridad, por su modus operandi, por el tipo de armas utilizadas y por el vehículo.

Así, según apuntó, desde 1998 consta en varios atracos la presencia de un vehículo Suzuki Santana de color blanco y, posteriormente la utilización de un todoterreno de similares características de color azulverdoso, es decir, de unas características similares al que avistaron testigos y la propia Guardia Civil el 9 de junio de 2004 en la zona de Castejón.

Preguntado sobre el hecho de que un testigo viera un todoterreno Suzuki con matrícula de Logroño en la zona del crimen y que después la Guardia Civil vieron un coche similar con matrícula de Zaragoza, explicó que encaja con el modus operandi de Giménez Arbe, ya que pudo cambiar las placas durante su huída.

OTRA TESTIGO LE RECONOCE

Por otra parte, en la segunda sesión del juicio comparecieron cuatro testigos protegidos que se encontraban cerca del lugar en el que se cometió el asesinato el 9 de junio de 2004. Como ya hiciera ayer un vecino de la zona, otra testigo protegida reconoció a Jaime Giménez Arbe como el ocupante de un todoterreno verde que se encontró de frente el 9 de junio de 2004 en la carretera N-113, en la que fueron tiroteados los dos agentes. La testigo explicó que el año pasado telefoneó de motu propio a la Guardia Civil para asegurar que el atracador que había sido detenido en Portugal era la misma persona que se encontró en la carretera N-113 el mismo día que fueron asesinados los dos agentes.

"Fue un encuentro fortuito en la carretera N-113. Lo recuerdo muy bien, porque cometí un error. Yo entraba de la N-122, me equivoqué con las líneas amarillas de obras y me metí en dirección contraria. Llegué a un alto y salió de un camino un todoterreno pequeño verde que se colocó en frente de mí, y yo caí en la cuenta e que iba en dirección contraria", dijo.

Así, según explicó la testigo, se puso a su altura para disculparse con él, pero no fue atendida por el ocupante del todoterreno. "Él miraba a izquierda y derecha por los espejos retrovisores. Miraba de una manera muy extraña que no alcanzaba a comprender. Llegué a pensar que si tenía una escopeta me mataba. Fue un momento tenso. Tuve una impresión fuerte de peligro. Me quedé perfectamente con su cara", dijo, y acto seguido reconoció a 'El Solitario' como el conductor del todoterreno.

Además de esta testigo, al igual que sucediera ayer varios testigos protegidos fueron preguntados por el vehículo desde el cual fueron tiroteados los agentes. Un transportista explicó que se fijó cómo detrás de él circulaba un "vehículo ligero" verde que podría ser un Suzuki, pero no pudo precisar el modelo.

Otro testigo que se cruzó en la carretera con el todoterreno y con la patrulla de la Guardia Civil señaló igualmente que el primer vehículo era un Suzuki. No especificó qué modelo, pero aseguró que no era un Vitara.

Un tercer testigo protegido explicó cómo sobre el día de los hechos observó un vehículo todoterreno que circulaba a "bastante velocidad por un camino, del que salía bastante polvo", en un camino en la zona de Bardenas. Tampoco pudo determinar la marca del vehículo.

La Fiscalía mantiene la tesis de que Giménez Arbe circulaba en un Suzuki Samurai, mientras que el procesado aseguró que él recibió en Zaragoza un Suzuki Vitara.

Además de los agentes y los testigos protegidos, en el juicio también compareció muy brevemente el hijo de Jaime Giménez Arbe, Jaime Giménez, quien explicó que por la presión mediática él y su madre tuvieron que trasladarse al Reino Unido.