Publicado 18/09/2018 08:02

Luis del Val.- Subir impuestos

MADRID, 18 Sep. (OTR/PRESS) -

Cualquier político en el poder, por muy extensa que sea su dificultad para aprender, descubre enseguida que una de las fórmulas más sencillas para recaudar dinero es subir los impuestos. Para llegar a esa conclusión no necesita ser doctor en Economía, y puede arribar a la compresión de ese principio sencillo, sin siquiera haber terminado una licenciatura. Entonces ¿por qué puñetas los gobernantes de todo el mundo, cuando se encuentran con dificultades para subvencionar a los parados, a los menesterosos, o sea, cuando necesitan más dinero, no suben los impuestos? Porque si los impuestos suben demasiado la gente compra menos, se restringe el gasto familiar, el comerciante mengua sus ventas, el fabricante ve que disminuyen los pedidos, y como no hay pedidos pone a los trabajadores en la calle, y eso hace que aumente el paro y estemos peor que antes.

En cuanto comienza una campaña electoral siempre hay un tonto contemporáneo de guardia que dice eso tan bonito de que con él pagarán más los que más tienen. Bueno, eso es lo que sucede en todos los países democráticos, desde hace decenas de años, porque los impuestos son progresivos, y cuanto más ingresa un ciudadano, más dinero le cobra el Fisco viva en Carolina del Norte, en Estocolmo, en Marsella o en Calatayud. Lo que ocurre es que hay una gran vocación por descubrir el Mediterráneo, aunque ello suponga hacer un poco el ridículo.

En realidad, los muy ricos son los que más se escaquean, los más difícil de controlar, también en todos los países. Y en todos los países la mayor parte de la carga impositiva se saca de los bolsillos de los que tienen una nómina o un pequeño negocio, que son los que aportan el 90% del presupuesto. Así que cuando dicen que van a subir los impuestos a los que más tienen, no se refieren a millonarios: están hablando de usted y de mí.

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