Las quejas aluden a adoctrinamiento contra Policía o Guardia Civil, como una supuesta excusión ante una comisaría con cánticos independentistas
MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
El Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, ha confirmado este miércoles que ha recibido 28 quejas por adoctrinamiento en colegios públicos de Cataluña desde septiembre de 2017, y algunas de ellas, según precisa, "se referían a conductas concretas cuya descripción podría resultar indiciaria de la existencia de posibles casos de adoctrinamiento en el ámbito educativo".
En concreto, algunas de las quejas recibidas por el Defensor del Pueblo se denuncia haber llevado a los estudiantes ante una comisaría de policía "para realizar cantos de carácter independentista y en contra de la Policía Nacional", o incitar a alumnos a manifestarse contra la detención, hace un año, de los presidentes de la Asamblea Nacional de Catalunya y de Òmnium Cultural, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart.
En declaraciones a los medios, Fernández Marugán ha detallado que las quejas están presentadas "con nombre y apellidos", pero ninguna hace referencia a libros de texto o símbolos políticos como los lazos amarillos. Según el Defensor del Pueblo, las quejas han sido remitidas tanto al Ministerio de Educación como al Departamento de Enseñanza de la Generalitat de Catalunya, que son las administraciones, según Fernández Marugán, que deben averiguar si realmente existen estos casos de adoctrinamiento.
Sobre el contenido de las quejas presentadas ante el Defensor del Pueblo, estas hacen referencia a requerimientos de autorización paterna "para la participación de sus hijos en la huelga educativa convocada para el día 28 de septiembre de 2017, o "permitir a una profesora reunir a todos los alumnos del centro para explicarles que la Policía Nacional había coartado la democracia en Cataluña".
En otras, se denuncia el adoctrinamiento al alumnado "en contra de la Policía Nacional, la Guardia Civil y el Estado Español", "inculcar a los alumnos de forma reiterada por algunos profesores su ideología nacionalista" o "manifestar a los alumnos en clase que la Policía y la Guardia Civil les harían daño si los vieran, al igual que hicieron el día de las votaciones en que pegaron a niños y personas mayores", en referencia a las cargas del 1 de octubre de 2017 en Cataluña durante la celebración del referéndum ilegal.
"A nosotros esto nos lleva a una reflexión. La educación tiene como objetivo fundamental enseñarte a pensar, no decirte lo que tienes que pensar", ha defendido Fernández Marugán antes de comparecer en la Comisión Mixta de Relaciones con el Defensor del Pueblo, donde Ciudadanos ha solicitado que informe sobre los supuestos casos de adoctrinamiento en Cataluña y las denuncias que ha recibido su institución sobre este asunto.
En su intervención, el Defensor del Pueblo ha detallado que las quejas recibidas aluden a centros ubicados en las localidades catalanas de Vilafranca del Penedès, Manresa, Sant Anddreu de la Barca, Premià de Mar, Badalona y Santa Coloma de Gramenet, pero considera que el número de denuncias recibidas por la institución "en términos relativos no es significativo".
RESPUESTA "INSUFICIENTE" DEL MINISTERIO
El Defensor del Pueblo ha asegurado que estas quejas fueron trasladadas al Ministerio de Educación, Cultura y Deporte cuando estaba al frente de la cartera Íñigo Méndez de Vigo, que asumía también, por la aplicación del artículo 155, las competencias en educación de Cataluña. Más tarde, se solicitó al Ministerio "información relativa a los resultados que se derivasen de sus actuaciones" ante estas quejas, y Fernández Marugán ha subrayado que la solicitud de información "hubo de reiterarse en dos ocasiones sucesivas".
La respuesta llegó el pasado mes de abril, y en ella se explicaba que el Departamento de Enseñanza de la Generalitat consideraba, en octubre de 2017, antes de la aplicación del artículo 155, que lo que se había producido en los colegios denunciados eran "manifestaciones promovidas por el alumnado que contaba con autorización paterna" y no fueron "organizadas o promovidas por los directores o docentes de los centros educativos", según la entonces consejera Clara Ponsatí.
Para el Defensor del Pueblo, el informe ofrecido por el Ministerio de Educación era "claramente insuficiente" porque no valoraba la actuación de la administración educativa de Cataluña y no aportaba datos sobre las actuaciones inspectoras, supervisoras y de control que deberían haberse realizado desde el propio Ministerio.
Fernández Marugán también ha puntualizado que en "fechas recientes" su institución ha recibido "cuatro nuevos escritos" en relación con el adoctrinamiento remitidos por un diputado del Congreso, una diputada española en el Parlamento Europeo, dos asociaciones catalanas y un sindicato de funcionarios, aunque no ha concretado sus identidades.
LOS GRUPOS: DE "MUY GRAVE" A UN "PROBLEMA QUE NO EXISTE"
Los grupos del Congreso han extraído diferentes conclusiones de las explicaciones del Defensor del Pueblo. Para la diputada del Partido Popular Nuria Simón, "en Cataluña llevan 35 años adoctrinando en el odio a España" y, parafraseando a Fernández Marugán, ha asegurado que "en las escuelas catalanas no se enseña a pensar, sino a qué pensar".
En un sentido similar, el diputado de Ciudadanos Rodrigo Gómez ha asegurado que los casos de adoctrinamiento "aunque unos quieran negarlos ahí están". "Tan sólo con que existiera un caso sería muy grave, porque afecta a lo más sagrado, a la libertad de ideología", ha expuesto el representante de la formación que había solicitado la intervención del Defensor del Pueblo.
El resto de grupos, por el contrario, han cuestionado de una forma u otra la existencia de adoctrinamiento en la escuela pública catalana. "No creemos un problema que no existe, que bastante tenemos con lo que tenemos", ha pedido el socialista César Luena, acusando a Ciudadanos de utilizar estos casos como parte de una "estrategia partidista". O en palabras de Lucía Martín, de Unidos Podemos, "una irresponsabilidad", y ha reprochado a la formación naranja de "hacer política con un bidón de gasolina y una cerilla".
Para el diputado del PNV Joseba Andoni Agirretxea, las explicaciones de Fernández Marugán dejan las denuncias en "agua de borrajas", o en "burda comedia", según Francesc Xavier Eritja, de ERC, que ha pedido a PP y Ciudadanos que "dejen de demonizar a los pedagogos y educadores" catalanes como "si fueran de la Stasi", recordando que algunos de los docentes señalados por adoctrinamiento "han recibido amenazas de muerte". Jordi Xuclà, del PdeCAT, también ha pedido a Ciudadanos que deje la "sobreactuación".
