MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un centenar de personas han tomado la calle este lunes en el centro de Madrid para "rebelarse" ante la inacción climática de los gobiernos, según cifras de la Policía.
Los activistas han ocupado sobre las 9.00 horas el puente de la calle Joaquín Costa, que se eleva por encima del Paseo de la Castellana, en las inmediaciones de Nuevos Ministerios, algunos sentándose o tumbados como motivo de protesta ante "la amenaza de catástrofe climática global", lo que ha provocando el corte del tráfico en ese punto e importantes atascos.
Muy cerca de allí, otros activistas han improvisado una acampada frente al Ministerio para la Transición Ecológica.
La Unidad de Intervención de la Policía Nacional (UIP) ha desalojado al grupo, con varios detenidos por el momento, según ha informado a Europa Press un portavoz de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.
La acción, organizada por Extinction Rebellion Spain (XR) y 2020 Rebelión por el Clima, pretende "empujar" en España los cambios necesarios que reclama la sociedad para luchar contra el cambio climático, de manera "intergeneracional, apartidista y diversa". "Frente al colapso del que advierte la comunidad científica, urge tomar medidas inmediatas antes de llegar a un punto de no retorno", advierten.
Las organizaciones insisten en que sus acciones están planteadas con un "claro carácter reivindicativo, festivo y fundamentalmente pacífico". Su pretensión es hacer uso de la calle como espacio público para "ejercer la libertad de expresión y la lucha por la defensa del futuro del planeta". Mediante estos gestos se pretende lograr una "llamada de atención" al resto de la ciudadanía para que se sume y participe a la defensa democrática de los bienes comunes, como lo son los ecosistemas y el medio ambiente.
Y es que Extinction Rebellion Spain y 2020 Rebelión por el Clima consideran que el factor de cambio más potente es el movimiento civil con una amplia ola de movilización colectiva y pacífica que impulse el "abandono de la actual senda suicida".
DECLARACIÓN DE EMERGENCIA CLIMÁTICA
Ambas entidades reclaman un profundo cambio de sistema basado en: la declaración de emergencia climática que vaya acompañada de políticas acordes a lo marcado por la ciencia y recursos económicos suficientes para abordarlas; y la verdad, para que la ciudadanía conozca la "crítica" situación climática y ecológica que vive el planeta.
Asimismo, piden que este sistema esté basado en: la actuación inmediata, para conseguir reducciones drásticas de emisiones en el menor tiempo posible; la democracia real, mediante la puesta en marcha de instrumentos ciudadanos participativos de supervisión y garantía del cumplimiento de las medidas; y la justicia climática, para evitar que los sectores más vulnerables sean los que más sufran los efectos.
