MADRID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
La organización ecologista Greenpeace criticó hoy la "incapacidad" de la Unión Europea para salvar del "fracaso" a la Cumbre contra el cambio climático celebrada en Copenhague. A su juicio, la declaración acordada por los líderes mundiales en la últimas horas ha sido únicamente un "lavado de imagen" porque no se acerca a lo necesario para mantener el cambio climático "bajo control".
"Copenhague ha sido la mayor reunión política que jamás ha visto el planeta y la UE ha decidido quedarse en la retaguardia. La UE pretende tener peso político, pero no ha sido capaz de mostrar mayor ambición sobre reducción de emisiones para influir sobre EE.UU. ni China", afirmó la responsable de la campaña de cambio climático de Greenpeace, Aida Vila.
La portavoz española también dijo que la actitud de la UE de "yo te doy si tú me das" no es la que dio el acuerdo en Kioto, ni la que devolvió a EEUU a las negociaciones climáticas. "La vergüenza de Copenhague debe reemplazarse por la determinación de lograr un acuerdo con significado para mitad de año", añadió.
Asimismo, el director ejecutivo de Greenpeace Internacional, Kumi Naidoo, señaló que la ciudad de Copenhague se ha convertido en "la escena de un crimen climático" esta noche, "con los culpables huyendo hacia el aeropuerto". "Los líderes mundiales tenían una oportunidad única en su vida para cambiar el mundo para bien, para evitar un cambio climático catastrófico, pero al final han llegado a un acuerdo pobre lleno de agujeros tan grandes que por ellos cabría el Air Force One", lamentó.
Según recordó Naidoo, la ciencia del clima tiene sólo "unos pocos años" para detener el aumento de emisiones antes de hacer rápidas reducciones que darían la mejor oportunidad de evitar un cambio climático peligroso. "No podemos cambiar la ciencia, así que lo que tendremos que cambiar es la política; y todo indica que tendríamos que cambiar a los políticos", apostilló.
Asimismo, advirtió de que esto no ha acabado porque las personas de "todo el mundo" exigían un acuerdo "real" antes de que la cumbre empezase y, aseguró, "lo siguen exigiendo todavía". Por este motivo, señaló que aún se puede salvar a "cientos de millones" de personas "de la devastación de un mundo que se calienta, pero se acaba de hacer mucho más difícil".
