MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
SEO/BirdLife y la asociación de profesionales forestales de España PROFOR han reclamado un cambio en la estrategia de lucha contra el fuego en la cordillera Cantábrica a través de un manifiesto que ha sido apoyado por las principales ONG ecologistas, en el que se advierte de que los fuegos en esta zona tienen la singularidad de que, a diferencia del resto de España, ocurren en los meses invernales.
Estas organizaciones pide un "mayor esfuerzo en la prevención" y "no destinar la mayoría de fondos al modelo actual basado en la extinción". Por ello, insisten en que esta nueva estrategia debe centrarse en incidir en las causas estructurales de los incendios forestales que tienen que ver sobre todo con los aprovechamientos ganaderos de nuestros montes y el arraigo cultural de estas prácticas.
Tal y como muestran las cifras oficiales, lejos de disminuir, los montes cada año sufren un número mayor de incendios. Según datos del Ministerio de Medio Ambiente recogidos por estas organizaciones, tan sólo en 2010 se produjeron en Asturias y Cantabria 2.626 incendios que destruyeron 14.612 hectáreas de suelo forestal.
Sin embargo, SEO/BirdLife y PROFOR han señalado que "la principal amenaza de estos incendios no se deriva de las enormes superficies afectadas, sino la recurrencia con que determinados ecosistemas se ven afectados por el fuego". Estos fuegos tienen además consecuencias importantes sobre la biodiversidad y el suelo y no hacen sino acelerar los procesos de erosión y pérdida de suelo, además de originar una degradación paulatina del monte.
"Especies en peligro de extinción como el oso pardo y el urogallo cantábrico se están viendo afectados por estos fuegos sobretodo en Asturias y León", han destacado. Otros efectos también muy nocivos son la contaminación atmosférica debido a la gran cantidad de CO2 que emiten estos incendios y el enturbamiento de los ríos, con sus consecuencias sobre especies tan emblemáticas como es el salmón atlántico.
El portavoz de SEO/BirdLife, Felipe González, se ha mostrado "convencido" de que si los habitantes de los montes de la cordillera cantábrica jugaran un papel central en el nuevo modelo de lucha contra el fuego se pondría fin a esta "catástrofe ambiental" que año tras año se produce en la cordillera.
Por su parte, el presidente de PROFOR, Elías Bayarri, ha declarado que "es necesaria una reflexión profunda en la sociedad que permita sentar las bases para el trabajo conjunto y coordinado de todos los actores implicados: administración, ganaderos, habitantes del mundo rural, ONG de conservación y ciudadanos en general".
