Villar Mir anuncia que recurrirá la multa a Ferroatlántica por la muerte de peces en el embalse de Fervenza

Actualizado: miércoles, 25 junio 2008 20:02

Cree "extraño" que se imponga la sanción sin que se haya cerrado la causa judicial y niega intereses económicos en el vaciado de la presa

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -

El propietario de Ferroatlántica, Juan Miguel Villar Mir, confirmó hoy su intención de recurrir la sanción de 600.000 euros que la Xunta impuso a esta empresa por la muerte masiva de peces el pasado mes de noviembre en el embalse de A Fervenza --en el río Xallas-- y mostró su "esperanza" de "no tener que llegar" a abrir un proceso contencioso-administrativo con la Administración autonómica.

"Espero que la Consellería de Medio Ambiente estudie nuestros razonamientos. Ojalá podamos resolver este tema sin llegar a un contencioso", deseó Villar Mir en una entrevista concedida a Europa Press. Además, apeló a la opinión de sus letrados para concluir que la multa, que fue recibida ayer martes en la sede de Ferroatlántica en Madrid, no está "ajustada a derecho".

Así, negó que el vaciado de la presa de A Fervenza tuviese como objetivo incrementar la producción hidroeléctrica, una de las principales acusaciones a Ferroatlántica que sustentan la sanción.

"Esa es una hipótesis falta de rigor", replicó el empresario y, al contrario, explicó que cada metro cúbico que se desembalsa de A Fervenza --el embalse ubicado en la parte superior del río-- debe pasar por el resto de centrales hidroeléctricas ubicadas en el Xallas, por lo que produce "los mismos kilowatios por hora".

"Ferroatlántica no tiene ni ha tenido interés en sacar el agua un día antes o después. Nos da lo mismo", sentenció, por lo que concluyó que las acusaciones en este sentido "no son realistas ni tienen fundamento".

PROCEDIMIENTO "EXTRAÑO".

Otra cuestión de procedimiento "importante", a juicio del empresario, es que la Xunta imponga esta multa sin que el juez encargado de la causa abierta por este asunto se haya pronunciado todavía, pese a que en el proceso judicial están imputados tanto dos representantes de la empresa --el consejero delegado de Energía de Ferroatlántica, José Luis González Haba; y el jefe de explotación del embalse, Román Lozano--, como dos altos cargos de Medio Ambiente --el director general de Augas de Galicia, José Luis Romero Valeiras; y el subdirector de Proyectos y Programas, Francisco Alonso--.

"Nos parece extraño que la Xunta suponga que la responsabilidad es de Ferroatlántica cuando el tema está sub-iudice", manifestó Villar Mir y, frente a eso, se mostró convencido de que la sentencia judicial eximirá "probablemente" a los empleados de Ferroatlántica porque "hicieron lo que tenían que hacer".

Así, en contra de la versión de Medio Ambiente, Villar Mir insistió en que la empresa no tiene "ninguna responsabilidad" en el desastre de A Fervenza. En este sentido, destacó que Ferroatlántica es "una simple concesionaria" de este y de otros embalses en el río Xallas y que "siempre" cumplió las "instrucciones" de la Xunta, a la que se refirió como "la autoridad".

INFORMACIÓN A LA XUNTA A DIARIO.

De este modo, Ferroatlántica está obligada "desde hace más de treinta años" a desembalsar a diario un caudal mínimo ecológico y a remitir cada jornada a Augas de Galicia un parte en el que consta el agua que entra en A Fervenza, la que se desembalsa y la que queda acumulada. "La Xunta ha ido conociendo día a día cómo bajaba el caudal", resolvió y, puesto que "ella es la autoridad", consideró que "pudo haber tomado cualquier decisión".

"Pero todavía más", continuó Villar Mir, quien recordó que Ferroatlántica envió un "fax especial" a Augas de Galicia el pasado 8 de noviembre --dos días antes de la muerte masiva de truchas y escalos-- para "advertir de que si se seguía soltando el caudal mínimo ecológico el embalse se iba a quedar sin agua". A pesar de que la empresa avisó de que "era un peligro", Medio Ambiente "no dijo nada", por lo que Ferroatlántica siguió "naturalmente" las "instrucciones generales" de la Xunta.

Pese a que el titular de Medio Ambiente, Manuel Vázquez, justificó en los días posteriores al desastre medioambiental que no existe ninguna figura administrativa que permita a la Consellería intervenir hasta que no se comunique que hay una "gestión atípica", Villar Mir reivindicó la capacidad de la Xunta "para decir lo que hubieran querido".

SEQUÍA: ORIGEN DEL DESASTRE.

Aunque abogó por que el juez encargado del caso sea el que dictamine "quién tiene la culpa de todo esto", el empresario consideró "justo" recordar que el pasado otoño fue "anormalmente seco" y aludió a esta situación metereológica como "el origen" de la catástrofe. En consecuencia, subrayó que, de no haber desembalsado el caudal mínimo ecológico de A Fervenza, no habría sido suficiente el agua en el resto del río, por lo que los peces "habrían muerto también, pero en los tramos inferiores".

Ante esta disyuntiva, Villar Mir se preguntó si esta fue la razón por la que Aguas de Galicia "no cambió las instrucciones generales". Pese a que insistió en que sus empleados "cumplieron las órdenes" de Medio Ambiente, concluyó que "también para la Xunta era una situación muy difícil".