MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los estudiantes de Secundaria y Bachillerato de la Comunidad de Madrid son menos tolerantes con los inmigrantes que los alumnos de Primaria, según una encuesta que asegura que, mientras tres de cada cuatro estudiantes de Primaria aceptan que en su clase haya inmigrantes, sólo la mitad lo hace en el segundo ciclo y en Bachillerato. Sin embargo, lo más preocupante es que el 15% de alumnos madrileños de instituto rechaza a los extranjeros que estudian en su misma clase, algo que puede tener mucho que ver con el acoso escolar. El 5% de los alumnos de 11 a 18 años se siente acosado por algún compañero y un 3% se considera maltratador.
Según el estudio, que ha sido patrocinado por la Fundación Hogar del Empleado (FUHEM) y realizado por el Instituto de Evaluación y asesoramiento Educativo (IDEA), los profesores también son el punto de mira de los niños acosadores. Un 12% de los alumnos siente que algunos profesores tienen miedo a determinados estudiantes.
La encuesta, que se realizó a unos 2.000 alumnos de centros de Primaria y Secundaria de la Comunidad de Madrid, es extrapolable, según indicaron sus autores, al resto de España.
El fracaso escolar también se ha visto reflejado en el estudio porque la mayoría de los encuestados cree que los estudiantes, es decir ellos mismos, muestran poco interés por aprender, apostando incluso por aumentar el presupuesto educativo (45,8%). Pero los alumnos proponen además otras modificaciones para lograr una mejora educativa, por ejemplo, un 42% quiere cambiar el horario de las clases y un 41% cambiaría las instalaciones de los centros escolares.
CUANTO MÁS MAYORES, MENOR TOLERANCIA
Tal y como valoró el co-autor del estudio y asesor de IDEA, Álvaro Marchesi, las cifras de maltrato presentadas son preocupantes porque los porcentajes de los estudiantes acosados suponen en total miles. El estudio concluye que el 5% de los alumnos de 11 a 18 años se siente acosado por algún compañero y un 3% se considera maltratador. Pidió que se centre la atención en los primeros cursos de ESO porque en ellos se detecta un mayor incremento de la conflictividad. Lanzó además una "luz de alarma" porque, según dijo, con la edad y la madurez no hay más tolerancia hacia los inmigrantes, sino todo lo contrario.
Los datos, en cuanto a la aceptación de los extranjeros en los colegios, son muy preocupantes porque el 15% de los alumnos no está de acuerdo con que haya inmigrantes en su clase. En cambio, en Primaria la aceptación es casi plena, tres de cada cuatro estudiantes de menos de 12 años acepta a este colectivo, aunque en función del aumento de curso la tolerancia va disminuyendo.
Los niños que estudian en la escuela pública manifiestan una actitud algo más positiva que los alumnos procedentes de centros privados: 69% de aceptación frente al 54,8, respectivamente.
