MADRID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
La subcomisión del Congreso encargada de analizar la reforma del aborto finalizará hoy con la comparecencia de los representantes de E-Cristians, de la Fundación Madrina y de la Asociación de Mujeres Juristas Themis.
De este modo, la subcomisión habrá escuchado en poco más de un mes a 29 especialistas en esta materia. De ellos, doce fueron llamados a comparecer por el PSOE, doce por el PP, cuatro por el grupo parlamentario formado por ERC, IU e ICV, y uno por el Bloque Nacionalista Galego. El PNV y CiU, por su parte, decidieron no citar a ningún ponente porque existe disparidad de opiniones sobre el aborto en sus formaciones.
Así, las letradas de la subcomisión comenzarán a redactar a partir de hoy un informe en el que se recogerán las principales ideas expuestas por los ponentes. A partir de este documento, los diputados confeccionarán un texto común sobre las recomendaciones que quieren enviar al Ejecutivo para que éste las tenga en cuenta en su nueva ley sobre interrupción voluntaria del embarazo.
La subcomisión quiere que este informe esté en manos del Comité de Expertos del Gobierno hacia el mes de febrero, aunque todo depende del tiempo que se demoren las negociaciones entre los grupos parlamentarios. Las formaciones políticas que no estén de acuerdo con las conclusiones acordadas por la subcomisión podrán emitir un voto particular en el que manifiesten sus discrepancias.
Éste será, probablemente, el caso del PP, que se opone a una futura Ley de Plazos y Supuestos y aboga por aplicar la actual legislación introduciendo algunos perfeccionamientos jurídicos, según informaron fuentes parlamentarias a Europa Press.
"La posición del PP es muy clara: no es necesario una modificación legal en la línea de una ley de plazos como la que plantea el Gobierno", aseveró en rueda de prensa la semana pasada la portavoz del Grupo Popular, Soraya Sáenz de Santamaría, quien apostó por reforzar "el control a las clínicas" privadas que practican estas interrupciones.
En el caso de finalizar en febrero, la subcomisión habría terminado sus trabajos antes de la fecha prevista, ya que tenía seis meses desde octubre para redactar las conclusiones.
