ROMA, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El administrador apostólico de Estonia, mons. Philippe Jean-Charles Jourdan, único obispo del país báltico donde los católicos no llegan a 7.000 católicos, la mitad extranjeros (polacos, ucranianos y lituanos), de una población total de 1,3 millones de habitantes, ha señalado que la Iglesia católica también debe "dar la voz y escuchar a los ateos".
"La Iglesia tiene que dar voz y preocuparse de los ateos. Tiene que escucharles, esto no quiere decir que tiene que creer lo que ellos dicen, pero sí escucharlos", ha afirmado en una entrevista con Europa Press.
Según el Eurobarómetro de 2015, en Estonia, cree en Dios sólo el 16% de la población: otro 54% cree que "algo hay" y un 26% de personas creen que "no hay ningún espíritu, Dios o fuerza vital".
Desde la reforma protestante, en el siglo XVI, Monseñor Jourdan es el segundo obispo del país báltico. El Papa visitó Estonia en septiembre de 2018 después en un viaje más largo que incluyó Letonia y Lituania y Monseñor Jourdan hace "un balance muy positivo".
"Después de Letonia y Lituania donde hay un porcentaje más alto de católicos, el Papa sabía que iba a encontrarse con una sociedad mayoritariamente no religiosa. Pero la calidez con la que fue recibido por los estonios le sorprendió. No quiero decir que toda Estonia es católica ahora, pero la visita del Papa ha sido positiva. Incluso ha habido un repunte de la gente que ha visitado las parroquias, se ha interesado por el catolicismo y ha comenzado un camino hacia el bautismo", ha señalado.
"Para el estonio medio la iglesia católica era algo muy lejano, algo de los italianos o algo del siglo XV y XVI y eso ha cambiado. Ahora tienen una percepción mejor de la Iglesia católica. Y esto es gracias al Papa que usó un lenguaje concreto y práctico y cayó muy bien a los paganos", ha agregado. Monsor Jourdan ha explicado como incluso la presidenta de Estonia, Kersti Kaljulaid, que es una atea declarada le confesó que lo que había dicho el Papa le había servido mucho.
"Saber hablar a personas que están muy muy lejos de la fe es fundamental", ha defendido.
En este sentido, ha señalado que la presencia de católicos en Estonia ha ido creciendo. "La iglesia es pequeña pero crece lentamente y sin pausa. En los años 70 había 5 o 6 católicos al final del comunismo 2500 y hoy son casi 7000 según las últimas cifras del Estado", ha referido.
Así, ha revelado que tras el encuentro ecuménico con jóvenes en Tallin, que contó con testimonios de católicos ortodoxos y luteranos, el Papa le dijo que "hubiera sido bueno que un no creyente hablase de su búsqueda porque había muchos jóvenes no creyentes". Y ha reconocido a este respecto: "Dimos la voz a diferentes confesiones pero no a la mayoría que son los no creyentes".
Preguntado sobre cómo atraer a más gente a las parroquias, no sólo en Estonia sino también en España donde el último barómetro del CIS, dice que dos de cada tres españoles se declaran católicos, pero no llega a un tercio de ellos (el 22,7%) los que afirman ir a misa o confesarse, Monseñor Jourdan ha abrazado la opción de dar más espacio a los laicos y sobre todo invertir en su formación: "Es importante apoyarse en los laicos. Se ve cada vez más que los sacerdotes no podemos hacer todo y además cada vez hay menos ordenaciones sacerdotales. Pero es fundamental invertir en formación". "Es un mantra que repiten muchos sacerdotes lo de dar más protagonismo a los laicos, pero si la persona no está formada puede ser un riesgo", ha concluido.
