BARCELONA, 26 May. (EUROPA PRESS) -
El arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sístach, ha anunciado hoy un plan a tres años en el que impulsará la formación en la fe de los jóvenes, el apoyo la transmisión de la fe en las familias, y mejorar la devoción y la liturgia de la Eucaristía.
"El relativismo, las crisis de fe y el confusionismo religioso" son algunas de las realidades sociales que dificultan la transmisión de valores a los jóvenes, según explicó Sistach. Para paliarlo, el arzobispado promoverá una visión "gozosa e ilusionante" de la fe para mostrar a los jóvenes que "es posible vivir el cristianismo en la sociedad actual".
Sistach lamentó las repercusiones que pueden tener determinadas manifestaciones culturales, como el estreno de la película 'El Código da Vinci' a causa de "la gran ignorancia religiosa" que impera en nuestra sociedad.
RESPETO A LA CLASE DE RELIGIÓN.
En relación con la aprobación de la Ley Orgánica de Educación, Sistach destacó que "sería deseable que la clase de religión fuera respetada", porque "es un derecho inalienable de los padres", que son los educadores y responsables de la educación religiosa de sus hijos, sobre todo, teniendo en cuenta que "el 78% de los padres españoles piden la clase de religión católica para sus hijos". "La Administración debe garantizar el ejercicio de los derechos fundamentales de las personas", concluyó.
Otro de los objetivos que el arzobispado se ha marcado para el próximo trienio es ayudar a la familia a vivir la fe, ya que "ésta es la célula de la sociedad" y una institución "insustituible" para "la transformación de los jóvenes en los adultos del futuro".
En particular, una de las acciones que el arzobispado impulsará, apunta hacia la atención de los matrimonios que pasan por momentos difíciles. Para ello, se intentará mejorar la formación de los esposos especialmente en los primeros años de matrimonio, ya que, a veces, suelen ser especialmente difíciles, señaló Sistach.
El plan del arzobispado también promoverá las ayudas a las familias para ayudarlas a "proteger la vida de los no nacidos", sobre todo en los casos en que los padres estén reflexionando sobre la posibilidad de abortar.
El tercer objetivo de la diócesis apunta hacia la mejora de la celebración de la misa dominical, que es "la fuente de la vida cristiana", señaló. En particular, la diócesis intentará aumentar la calidad de la acústica y de los cantos, para acercar la liturgia a los fieles.
Sistach emplazó a todas las parroquias, movimientos de iglesia, instituciones y comunidades religiosas a secundar estas iniciativas, con tal de trabajar "todos juntos" en el servicio de la Iglesia y de la sociedad.
El arzobispado organizará mañana un acto en la Facultad de Ingeniería y Arquitectura de La Salle para presentar estos tres objetivos a los principales representantes de la comunidad cristiana.
