VALLADOLID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
El arzobispo de Valladolid, Braulio Rodríguez Plaza, llamó hoy a reflexionar sobre la situación de los 'sin techo' para reivindicar sus derechos, especialmente ante la Administración, y comprometerse "con acciones que lleven a un cambio real".
Este es el principal mensaje de Braulio Rodríguez en su carta semanal a los fieles de la Diócesis de Valladolid en la que aprovecha la celebración hoy del 'Día de los sin techo' para reflexionar sobre esta realidad social.
El prelado de Valladolid, que alude al artículo 47 de la Constitución Española según el cual todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada, lamenta las "situaciones sangrantes" que padecen las personas que viven en la calle con casos de exclusión social e incluso violencia.
"Se les hace violencia porque se les impide satisfacer sus necesidades fundamentales: alimentación, vivienda, vestido y también dignidad", continúa el arzobispo para quien la exclusión social de estos "hermanos" es fruto de la ruptura de la cohesión social. "Y no son tratados bien ni por los medios, ni por los poderes públicos que se implican poco, y lo más triste, ni por nuestras comunidades cristianas", reconoce Rodríguez Plaza, que considera que el primer paso debe ser la sensibilización y la reivindicación de los derechos de estas personas.
Así y tras advertir de que este problema debe ser afrontado por los poderes públicos, el arzobispo de Valladolid insiste en su carta pastoral recogida por Europa Press en que las comunidades cristianas no pueden cruzarse de brazos ya que "estas personas deben ser consideradas, tengan o no tengan culpa, sencillamente como personas". Dicho esto, anima a las Cáritas parroquiales a organizar de la mano de Cáritas diocesana reflexiones, presentación del problema, catequesis o sesiones explicativas.
"Se trata de empeñarse en solucionar algo muy visible en nuestras ciudades y pueblos, pues los sin techo son personas con mala salud, física o psíquica y han ido perdiendo poco a poco familia y amigos, por lo que carecen de relaciones sociales a las que acudir en demanda de ayuda", concluye el mitrado en su carta pastoral en la que defiende que para los católicos "estos hermanos sin techo pueden equipararse a los antiguos peregrinos, a los que había que dar posada como muestra de misericordia".
