MADRID, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
La decisión del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y de la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, de no asistir el domingo a la misa que celebrará el Papa fue hoy muy criticada por las autoridades locales. La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, aseguró que será "la primera vez que un presidente del Gobierno de cualquier signo político" no esté en un acto religioso cuando su Santidad ha venido a España. El portavoz de la Generalitat, Vicente Rambla directamente puso en duda la decisión anunciada ayer por el Gobierno por "imposible". Mientras, De la Vega, aseguró hoy tras el Consejo de Ministros que el Ejecutivo estará "perfectamente representado" con el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, y el de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, que sí estarán en la ceremonia.
Rita Barberá dijo que le parece "mal" la ausencia de Zapatero y De la Vega en la misa que oficiará Benedicto XVI, en cualquier caso, "ella no tiene que valorar nada", añadió. "Lo hacen porque han decidido hacerlo así. Están cumpliendo con su criterio", dijo la alcaldesa. No obstante, recordó que "es la primera vez que un presidente del Gobierno de cualquier signo político no está en un acto político cuando Su Santidad ha venido a España" y subrayó que será un gesto que valorarán los ciudadanos.
Por su parte, Vicente Rambla cree que es algo "imposible" y "difícil de creer". Según dijo, le cuesta creer que el presidente del Gobierno "decida no ir a la celebración más importante del Encuentro Mundial de las Familias, con presencia de centenares de miles de personas, de Sus Majestades los Reyes y de Su Santidad el Papa. "Tengo muy fundadas dudas de que eso se pueda confirmar", se limitó a decir.
RELACIONES CORDIALES
Sin embargo, De la Vega sí confirmó la decisión que ya se anunció ayer, argumentando que el Gobierno estará "perfectamente representado" con la presencia de los ministros de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos "como responsable de las relaciones diplomáticas de España con el Vaticano" y Juan Fernando López Aguilar, "que es el responsable de las relaciones entre la Iglesia y el Estado".
Pese a todo, aseguró que no hay "ningún problema" con el Vaticano, con quien el Gobierno mantiene unas relaciones "fluidas y cordiales, basadas en el respeto y en la lealtad propias de dos Estados soberanos". En cualquier caso, la vicepresidenta dijo que el Gobierno le da la bienvenida a Benedicto XVI. "Estamos seguros de que su estancia en el país le permitirá sentir de cerca el respeto de todos los ciudadanos que viven en España y desde luego el cariño de sus fieles", dijo.
