Cerca de 3.000 fieles despidieron en la Catedral de Santander al obispo Vilaplana

Actualizado: domingo, 20 agosto 2006 23:17

El obispo electo de Huelva se va de Cantabria "con el corazón repleto de amigos"

SANTANDER, 20 Ago. (ERUOPA PRESS) -

Cerca de 3.000 fieles acudieron en la tarde de hoy, domingo, a la misa de acción de gracias en la Catedral de Santander, que sirvió también de despedida al que ha sido obispo de Santander durante 15 años, José Vilaplana Blasco.

Tanto el interior de la Catedral, como todo el claustro exterior, incluido su patio central, estuvo ocupado por fieles, que ovacionaron a Vilaplana cuando atravesó en procesión el Claustro y la nave central del templo catedralicio para iniciar la Eucaristía.

Asimismo, la iglesia del Santísimo Cristo, situada debajo de la Catedral, tuvo sus puertas abiertas para acoger a los fieles que no cabían en el resto de los recintos citados. Este templo, también estuvo repleto de personas que siguieron la celebración a través de pantallas de televisión.

La emoción contenida entre los presentes y la numerosa asistencia de personas testimoniaron el cariño y la gratitud que el pueblo de Cantabria ha querido dispensar al que ha sido su pastor durante 15 años.

Igualmente, un elevado número de sacerdotes diocesanos quisieron estar presentes para concelebrar la misa con su obispo, como también estuvo en la ceremonia el arzobispo de Salamanca, Braulio Rodríguez Plaza.

En su homilía, Vilaplana aseguró que "yo no quiero ser protagonista esta tarde, porque soy un pobre servidor al servicio del único Buen Pastor que es el que estará siempre en medio de nosotros y es el que no nos abandona nunca".

"Deseo que esta tarde -prosiguió- hagamos de este encuentro una acción de gracias a Dios porque el Señor nos ha concedido quince años para estrechar más fuertemente nuestros lazos de fraternidad; para descubrirnos como amigos y para compartir proyectos al servicio del Reino de Dios, como el Jubileo del Año 2.000, el Jubileo del Año Diocesano y Mariano 2004-2005, ó los Jubileos de Santo Toribio que nos han hecho vibrar juntos como Iglesia".

"Durante este tiempo -añadió- también hemos podido preguntarnos cómo atender mejor a aquellos que nos necesitan y hemos cuajado juntos proyectos al servicio de los pobres más cercanos; ¿No es esto hermoso?", se preguntó el prelado de la Iglesia de Cantabria.

"Un traslado, un cambio -dijo-, siempre suponen un tirón para el corazón y, al considerar estos años, os quiero también pediros perdón por las veces que no he estado a la altura del ministerio que se me había confiado, pero me abandono a vuestra comprensión y sé que es mucho más lo bueno, que lo deficiente".

Es por ello que el o9bispo electo de Huelva aseguró que se va "contento y alegre porque he podido servir al Evangelio de Jesucristo en medio de vosotros", resaltó.

Vilaplana instó en su homilía a poner "la mirada y el corazón en Cristo Buen Pastor; vivid este momento como un acontecimiento en el que podamos decir que hemos crecido todos más".

Por último, el Obispo de Santander refirió que, "el Señor me ha regalado a vosotros como pastor durante estos quince años y por eso me voy con el corazón repleto de amigos y nunca os olvidaré, ni tampoco nunca saldréis de mi corazón".

Vilaplana iniciará oficialmente su Ministerio Episcopal en la Diócesis de Huelva, el sábado 23 de septiembre, en una celebración en la Catedral onubense, que se iniciará a las siete de la tarde.

Hasta este día Vilaplana, seguirá siendo Obispo de Santander por las atribuciones que le confiere el Derecho Canónico. A partir de esta jornada y hora citada del 23 de septiembre, comienza el período de Sede Vacante de la Diócesis de Santander, en espera del nombramiento de un nuevo Obispo por la Santa Sede.