Cientos de personas despidieron al ex alcalde de Benidorm Pedro Zaragoza durante su funeral

Actualizado: miércoles, 2 abril 2008 19:35

BENIDORM (ALICANTE), 2 Abr. (EUROPA PRESS) -

Cientos de personas despidieron esta mañana en Benidorm (Alicante) al que fuera alcalde de la ciudad entre los años 1950 y 1967, Pedro Zaragoza Orts. El féretro del ex alcalde fue transportado a hombros por familiares y amigos desde la capilla ardiente en el Ayuntamiento hasta la Iglesia de San Jaime y Santa Ana acompañado de los sones de marchas fúnebres interpretadas por la banda de la Unión Musical.

Pedro Zaragoza, seguido de multitud de coronas y ramos de flores, fue recibido con una ovación cerrada a la entrada del templo. Una vez en la iglesia, el cuerpo del ex alcalde fue presentado ante la Virgen del Sufragio, la patrona de Benidorm, antes de ser colocado ante el altar mayor para presidir una misa cantada.

La misa, oficiada por el vicario episcopal de la zona quinta, Juan Agost, enviado expresamente por el obispo de la diócesis de Orihuela-Alicante, Rafael Palmero, contó con la participación del párroco de San Jaime y Santa Ana, Luis López y de párrocos de localidades limítrofes e incluso de Alicante.

En el oficio participó también el sacerdote benidormense adscrito a San Jaime y Santa Ana, Juan Rodríguez, que recordó el perfil humano de Pedro Zaragoza. Así, Rodríguez destacó "el gran luchador que era el ex alcalde, su exigencia personal para conseguir lo mejor para todos y el amor por su tierra, por su pueblo".

Al funeral asistieron los miembros de la corporación, de los dos grupos municipales, alcaldes de diferentes localidades alicantinas como el de Finestrat, Honorato Algado, o el de Callosa, Batiste Saval; ex alcaldes de Benidorm y numerosos representantes de la sociedad civil benidormense y de sus asociaciones.

Durante la misa intervino también el hijo de Pedro Zaragoza, Francisco Zaragoza, quien recordó "la figura humana de su padre y su esfuerzo para que siempre, aprendiesen a perdonar". Francisco Zaragoza añadió también que le gustaría "tener la mitad del corazón que ha tenido él, en el sentido de darse a los demás sin pedir nada a cambio".

De esta forma, el hijo de Pedro Zaragoza apuntó también que "a nosotros --refiriéndose a los hijos del propio Pedro Zaragoza-- nos ha enseñado a querer a los demás sin importarnos el daño que nos pudieran haber hecho".

Francisco Zaragoza, recordó además "el espíritu luchador" que el alcalde que impulsó el turismo en Benidorm "mantuvo hasta el final" ya que cuando ingresó en el hospital "desde el viernes al domingo no paró de hacer bromas, de meterse con las enfermeras, con los enfermeros, con la gente que venía a verle, hasta el último aliento estuvo luchando".

Tras finalizar el funeral, el alcalde de Benidorm, Manuel Pérez Fenoll, destacó "la impresionante respuesta" del pueblo de Benidorm para dar su último adiós a Pedro Zaragoza. Pérez Fenoll indicó también que Pedro Zaragoza "es un alcalde al que le debemos muchísimo y que fue marcando ese camino que ha hecho que Benidorm sea lo que es y eso se lo reconoce todo el mundo".

Por otra parte, el cuerpo de Pedro Zaragoza, tras salir de la iglesia donde se celebró su funeral entre aplausos, fue enterrado en el Cementerio Nuevo, donde sus restos reposan ya.

Previamente a la ceremonia celebrada en la la Iglesia de San Jaime y Santa Ana, el alcalde de la ciudad le impuso la Medalla de Oro de la Ciudad, en el curso de un breve acto que tuvo lugar en la capilla ardiente que durante un día permaneció abierta al público en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Benidorm.