BARCELONA, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las retenciones de hasta 70 kilómetros que ayer colapsaron la autopista AP-7 dirección Tarragona en el marco del segundo fin de semana de operación salida para las vacaciones de verano obligó a levantar las barreras de los peajes de la citada vía, según un acuerdo de la Generalitat y la concesionaria Acesa.
Sin embargo, mientras que el Servicio Catalán de Tráfico (SCT), dependiente de la Conselleria de Interior del Govern, anunció que la apertura de los citados peajes se realizaba de forma global durante dos o tres horas para descongestionar la carretera, Acesa aplicó la medida de forma selectiva e intermitente.
La medida adoptada fue excepcional y pionera por motivos de colapso, si bien los peajes en las carreteras catalanas sólo habían sido abiertos por accidentes de tráfico o condiciones climatológicas adversas.
Por su parte, el Ayuntamiento de Tarragona, la Cámara de Comercio de Tarragona y el sector hotelero de la Costa Dorada reclamaron un protocolo que regule el levantamiento de barreras de la AP-7. A su juicio, esta medida no debería ser sólo algo puntual.
