VALLADOLID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha exigido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la Conferencia de Presidentes celebrada este domingo que se recalcule el fondo extraordinario del Gobierno para afrontar los gastos del COVID-19 y ha incidido en que, al menos, se tengan en cuenta los criterios de reparto del modelo de financiación autonómica, lo que supondrían 110 millones de euros más para la Comunidad.
Fernández Mañueco ha insistido en la necesidad de que este fondo extraordinario de 16.000 millones de euros llegue a las comunidades que más han sufrido la pandemia, entre las que se encuentra Castilla y León.
Así, ha reiterado que "lo justo" es que atienda los costes reales de la pandemia en sanidad y servicios sociales, por lo que ha criticado el cambio de criterios del Gobierno de Pedro Sánchez, cuyo último reparto "perjudica especialmente" a Castilla y León.
Mañueco ha explicado que estos nuevos criterios benefician a las comunidades con población más joven; con metro y cercanías; con más PIB y capacidad fiscal, mientras que perjudica a las comunidades con alta dispersión, con gran superficie y con población de más de 65 años. "Los territorios con menos población requieren apoyo y fondos, no necesitan recortes y que les den la espalda", ha afirmado.
Ante esta situación, ha pedido una reunión "inmediata" del Consejo de Política Fiscal y Financiera para discutir estos puntos. En concreto, la Junta reclama que en el fondo extraordinario se repongan los 2.000 recortados a sanidad y servicios sociales, y que para el reparto se utilice el modelo de financiación autonómica ordinario, con cuyos criterios Castilla y León recibiría más de 110 millones de euros a mayores.
Además, Fernández Mañueco ha recordado la conveniencia de recurrir al MEDE para financiar el gasto sanitario y garantizar el funcionamiento del sistema sanitario público, así como que se aclare el reparto de los fondos europeos y el escenario de déficit y deuda. Así, ha señalado que, una vez que la UE ha flexibilizado este escenario, el Gobierno debería hacer un reparto equitativo entre todas las administraciones públicas, puesto que "las comunidades autónomas necesitan más margen para gestionar mejor las que son sus competencias básicas: educación, sanidad y servicios sociales".
Sobre las entidades locales, ha subrayado que también falta concreción en la flexibilización de la regla de gasto y la utilización del superávit, que las entidades necesitan para poner en marcha medidas y ayudas muy importantes para avanzar en la recuperación económica en el conjunto de Castilla y León y también de España.
