BARCELONA, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
Una peña quinielística de Barcelona descubrió que el miembro y responsable de sellar cada semana el boleto en nombre de todo el grupo llevaba tres fines de semana sin hacerlo para quedarse con el dinero cuando les tocó un premio de catorce aciertos en el que habrían ganado 1.586 euros.
Cada uno de los 29 miembros de la peña 'El Indalo' ponía cada semana ocho euros, juntando así 232 euros de los cuales 192 los dedicaban a rellenar una quiniela de siete dobles y tres triples, y los 40 euros restantes a la Primitiva, según recoge el escrito en el que el fiscal pide un año y dos meses de prisión para el acusado de cara al juicio que se celebrará esta semana en la Ciudad de la Justicia de Barcelona.
En noviembre de 2008, el acusado, que trabajaba en el establecimiento en el que tendría que sellar las quinielas, decidió no hacerlos durante tres jornadas quedándose con 586 euros, pero fue descubierto cuando el boleto fue premiado en la jornada 23.
Según la calificación fiscal, el acusado ha devuelto "a un número no determinado de los integrantes del grupo el dinero entregado para la realización de las apuestas no formalizadas así como el porcentaje que les hubiera correspondido de haber sido percibido el premio".
Aun así, la Fiscalía ha pedido un año y dos meses de cárcel para el acusado, mientras que ninguno de los integrantes de la peña ha hecho ninguna reclamación económica.
