Enero a mayo de 2020 han sido los cinco primeros meses del año más cálidos en España desde que hay registros

Enero-mayo 2020, el arranque de año más cálido en España desde que hay registros.
Enero-mayo 2020, el arranque de año más cálido en España desde que hay registros. - AEMET
Publicado: viernes, 19 junio 2020 18:01

   MADRID, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -

   Los meses de enero a mayo de 2020 han sido los cinco primeros meses del año más cálidos en España desde que hay registros, según ha confirmado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) que señala, además, que el presente mes de junio podría terminar siendo el primer mes con carácter no cálido desde abril de 2019.

   Durante la rueda de prensa estacional, el portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, ha explicado que el carácter "extremadamente cálido" se debe a que la temperatura media del periodo que va del 1 de enero al 31 de mayo fue de 12,9 grados centígrados (C), los que supone una anomalía de 1,86C superior al valor normal para los cinco primeros meses del año respecto al periodo de referencia 1981-2010.

   El anterior plazo enero-mayo más caluroso en España fue el de 1997, que tuvo un valor medio de 12,84 grados centígrados.

   En cuanto a las precipitaciones de enero a mayo este periodo de cinco meses, el portavoz apunta que se han acumulado 317 litros por metro cuadrado, lo que supone un 9 por ciento más que el valor medio normal para la serie que va desde 1965 hasta el año 2020. Si bien, el periodo de enero a mayo de este año es el vigésimo-quinto más húmedo.

   La primavera ha sido muy húmeda pero fue precedida de un febrero extremadamente seco cuya precipitación fue la más baja desde que hay registros.

   En cuanto a lo que va del mes de junio, el portavoz ha explicado que de momento acumula una anomalía térmica negativa de 1 grado centígrado en el conjunto de España por lo que "gracias a este oasis" el primer semestre del 2020 podría evitar ser el periodo enero-junio más caluroso desde que hay registros en España.

   Sin embargo, a tenor de la predicción para los próximos días, no descarta que esa "ventaja" térmica o anomalía fría pueda ir disipándose por las altas temperaturas que se esperan al menos hasta el miércoles de modo que el mes podría terminar con un carácter normal e incluso, hasta algo más cálido de lo normal.

   En concreto, igual que en mayo, los primeros días del mes las temperaturas estuvieron por encima de lo normal, pero la llegada de aire frío en altura y el paso de un frente por el norte, dio como resultado que el día 4 se produjera una bajada generalizada de temperaturas, hasta valores más bajos de lo normal.

   Después, entre los días 5 y 6 hubo una recuperación de temperaturas, pero a partir del día 7 y hasta el 14 de junio los termómetros estuvieron continuamente por debajo de los valores normales.

   Los periodos de temperaturas más bajas han sido los días del 7 al 9, y el día 12 en que las temperaturas medias para el conjunto del territorio quedaron por debajo de los valores normales en más de 3C.

   Así, la temperatura media de la primera quincena del mes, hasta el día 14, quedó en torno a 1C por debajo de los valores normales. Según Del Campo, la anomalía negativa fue superior en las máximas que en las mínimas.

   En cuanto a las lluvias, ha explicado que también en la primera quincena de junio se produjeron varios episodios de precipitaciones, en

   muchas ocasiones acompañadas de tormentas. Casi todos los días ha habido precipitaciones en algún punto de España aunque fueran débiles y Del Campo destaca los días 3 y 4, que tuvieron precipitaciones en la Península y este de Baleares; los días 6 a 8 cuando las más intensas se dieron en el tercio este peninsular y Baleares y, después, los días 11 y 12 con precipitaciones en el tercio norte peninsular, que fueron de mayor intensidad en zonas de Cataluña.

   En definitiva, estas precipitaciones del 1 al 14 de junio en el conjunto de España han llevado a una acumulación en esas dos semanas "ligeramente" superiores a los valores normales.

   En extensas áreas de la mitad norte peninsular, zonas del sureste, Baleares y Canarias occidental, se superan dichos valores, mientras que en extensas áreas de la mitad sur peninsular y suroeste de Castilla y León no se alcanza ni la mitad de los valores normales.