SANTANDER, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -
La evolución del envejecimiento en las aves ha sido uno de los temas expuestos esta mañana por Alberto Velando, del departamento de Ecología y Biología Animal de la Universidad de Vigo en el XIX Congreso Español de Ornitología que se celebra en Santander.
Velando señaló cómo hasta ahora se pensaba que los procesos de envejecimiento, comunes a todos los animales, no eran relevantes en poblaciones naturales, ya que se creía que en la naturaleza los animales morían antes de que la senescencia actuase.
Sin embargo, estudios publicados en el último lustro señalan que la senescencia es un aspecto clave en los parámetros demográficos y en la evolución de las estrategias vitales en animales salvajes, especialmente en aves.
El principal reto actual es, según este experto, por qué los patrones de senescencia varían entre individuos, poblaciones y especies. Así, destacó los estudios llevados a cabo con el piquero de patas azules en la Isla Isabel, México, para ilustrar la importancia del envejecimiento en el comportamiento y demografía de las aves.
También se analizó en el congreso la colonización por parte de las aves de los montes incendiados. Entre las conclusiones, se destacó cómo los incendios no tienen por qué ser necesariamente negativos para el medio natural, y que en algunos casos pueden beneficiar a especies con un estado de conservación desfavorable a nivel europeo.
Se trata de aves que están especializadas en utilizar este tipo de ambientes, donde todavía no se ha regenerado la vegetación, y actúan como primeros colonizadores; es el caso, por ejemplo, del escribano hortelano o la collalba rubia.
Entre las presentaciones desarrolladas, Mario Díaz, del Instituto de Recursos Naturales, planteó cómo el papel ecológico fundamental que cumplen especies de aves no amenazadas en el medio natural está condicionado por los modelos de gestión llevados a cabo por el ser humano.
Esto se ha comprobado estudiando al arrendajo, principal dispersador de las semillas de la encina en el monte mediterráneo. Han demostrado que si la estructura de la vegetación no es la adecuada no pueden cumplir su misión.
Por su parte, Juan Antonio Fargallo, del Departamento de Ecología Evolutiva, del Museo Nacional de Ciencias Naturales-CSIC, mostró los resultado de un estudio sobre las relaciones poblacionales durante once años entre el cernícalo vulgar y algunas de sus presas: el lagarto ocelado, la musaraña gris y el topillo campesino.
Los resultados muestran que la densidad de cernícalos depende en gran medida de la densidad de topillos, y que las fluctuaciones numéricas de topillos y musarañas parecen a su vez estar determinadas por las densidades de cernícalo, por la precipitación y por la temperatura. Los depredadores generalistas cumplen, así, una función fundamental en el ecosistema para mantener las especies presa, como los topillos, en un nivel poblacional constante.
Por otra parte, varios investigadores se han dedicado durante los dos últimos años a observar el disco lunar en los plenilunios mensuales, es decir, a mirar la luna llena, en el estrecho de Gibraltar, para conocer los flujos migratorios de especies que viajan de noche.
Se ha detectado, tal y como señaló Alejandro Onrubia, de la Fundación Migres, que algunas noches pueden cruzar el Estrecho entre ocho y diez mil aves por kilómetro de cielo y hora, lo que daría la cifra de más de un millón y medio de aves en una jornada. Son fundamentalmente paseriformes (vencejos, zorzales, currucas, golondrinas, aviones o mosquiteros, entre otros), aunque también pasan otras aves de mayor tamaño, como garzas imperiales y reales, cigüeñuelas, fumareles o charranes.
Finalmente, la tarde de ayer se cerró con una sesión especial sobre los retos y perspectivas de la conservación de las aves en Cantabria, en la que la Dirección General de Biodiversidad del gobierno de Cantabria presentó el Catálogo Regional de Especies Amenazadas, recientemente aprobado, y sus planes para la recuperación de las que ostentan mayores problemas de conservación, como el urogallo cantábrico, el paíño europeo y el quebrantahuesos.
Por parte de Felipe González, delegado de SEO/BirdLife en Cantabria, se hizo un repaso a los diez años de existencia de esta delegación en la comunidad autónoma, destacando la colaboración con los municipios para recuperar espacios degradados e incluir criterios de biodiversidad en sus planes de ordenación urbana, y la implicación ciudadana en numerosos proyectos desarrollados por la organización.
