MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
Una puñalada con un cuchillo de quince centímetros en el corazón acabó esta madrugada con la vida de una mujer ecuatoriana de 29 años. El presunto asesino es el novio de la víctima, de 35 años de edad y nacionalidad dominicana, y ya tenía dos denuncias de su anterior pareja y una orden de alejamiento por malos tratos. Los hechos tuvieron lugar en Ávila y fueron presenciados por la hija del detenido que se encontraba en la casa en el momento de la agresión.
Entorno a las cuatro de la madrugada de hoy los agentes de Policía acudieron a la vivienda donde sucedieron los hechos, y allí encontraron a F.O.S, natural de la Republica Dominicana con un cuchillo en su poder y las manos manchadas de sangre, mientras que la mujer, A.M.U.J, de 29 años y natura de Ecuador, fue encontrada muerta y presentaba una herida por arma blanca a la altura del corazón. Ambos llevaban poco más de un mes de relación aunque no vivían juntos.
En la casa también se encontraba la hija del presunto agresor, una joven menor de edad, que gritó y se escondió en una esquina del recibidor. Ella fue la que abrió la puerta de la casa a los agentes de la Policía, que al ver al hombre armado con el cuchillo le indicaron que lo tirara al suelo, y ante la negativa de este tuvieron que reducirle y desarmarle por la fuerza.
Instantes después los agentes descubrieron el cuerpo todavía con vida de la mujer en el suelo, en posición lateral y con un gran charco de sangre a su alrededor. Pero aunque intentaron reanimarla, los Servicios de Emergencia del 112 sólo pudieron certificar su fallecimiento.
UNA LLAMADA ANÓNIMA
La Policía fue avisada de los hechos gracias a una llamada anónima que alertó de que en el primer piso de un edificio situado cerca de la céntrica estación de servicio situada en la avenida de Madrid y junto a la Estación de Autobuses, un hombre estaba agrediendo brutalmente a una mujer, y observaron antes de subir la ventana de la terraza de un primer piso abierta y con las luces encendidas. Además de que varias personas alertaron de haber oído gritos procedentes de esa vivienda.
El juez de guardia y el médico forense levantaron el cadáver, mientras que funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía de las Brigadas de Policía Científica y Policía Judicial recogen indicios y pruebas para aclarar lo sucedido.
