Hurtado, víctima española de abusos en la Iglesia, califica de "bofetada a la víctimas" la conclusión de la cumbre

Publicado: domingo, 24 febrero 2019 12:53

ROMA, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

Miguel Hurtado, primera víctima que denunció abusos sexuales cometidos por el monje de Montserrat Andreu Soler, considera que las conclusiones del Papa tras la cumbre vaticana sobre pederastia son una "bofetada a todas las víctimas" que estos días han convocado protestas en toda Roma para exigir 'tolerancia 0'.

"Se ha pasado la mitad del discurso hablando de los abusos fuera de la Iglesia. Y nosotros hemos sido abusados dentro de la iglesia (...) nos gustaría que nos diera una explicación sobre qué va a hacer con nuestros abusos", ha señalado en declaraciones a Europa Press.

A su juicio, el Pontífice ha intentado "externalizar el problema" diciendo que la lacra de la pederastia es la "acción del diablo". "Pero no, han sido los obispos, abades, sacerdotes y cardenales quienes siguiendo las directrices del Vaticano han encubierto durante décadas delitos gravísimos de pederastia", ha dicho.

Así, ha asegurado que hay un informe de la ONU de 2014 con medidas de acciones específicas que tiene que tomar la iglesia y que no han sido incluido en las propuestas del Pontífice. "Son un plan de acción global, no un plan de oración que es lo que propone el Papa. Medidas como entregar los archivos de la perversión a las autoridades civiles, denunciar todos los casos de pederastia a la policía y entregar a sacerdotes y obispo encubridores", ha subrayado.

"El Papa no ha aceptado estas propuestas y por eso está en una situación de crisis global", ha concluido.

Hurtado ha viajado al Vaticano para estar presente en la cumbre que ha reunido durante cuatro días a 190 jerarcas de la Iglesia Católica para tratar los absusos sexuales en el seno de la Iglesia. El pasado miércoles se reunión con los organizadores de la cumbre junto con una docena de afectados de todo el mundo, aunque no ha participado directamente en el encuentro.

Distintas asociaciones protestaron este sábado en Roma para reclamar justicia y tolerancia 0 ante los curas abusadores. Los manifestantes se reunieron bajo el lema 'Marcha cero por la tolerancia' y recorrieron varias calles de Roma desde la Piazza del Popolo de la capital italiana hasta el Castel Sant'Angelo. Llevaban pancartas con diferentes escritos como 'Demasiados curas pedófilos' o 'El milagro: creer al Vaticano'.

Peter Isely, portavoz americano de la organización ECA (Ending Clergy Abuse), una de las organizaciones más activas, dejó claro que ya no bastan los eslóganes: "Exigimos que cualquier sacerdote, monje o hermano que abuse sexualmente de un menor sea expulsado del clero y acto seguido puesto en manos de las autoridades para que la justicia ordinaria lo juzgue y acabe en prisión", manifestó ante periodistas.

Isely, que fue violado durante su infancia por un sacerdote de Wisconsin, prometió que seguirán haciendo ruido hasta que haya tolerancia cero. En la práctica lo que le piden al Papa es que los curas abusadores acaben como el arzobispo emérito de Washington y durante décadas uno de los hombres con más poder en la Iglesia católica en Estados Unidos, Theodore McCarrick: reducidos al estado laical. Es decir, sin poder administrar sacramentos, presentarse o vestirse como un sacerdote, ni tanto menos recibir asignación económica.