MADRID, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un incendio declarado esta mañana acabó hoy con el edificio del Obispado de Tenerife, declarado Patrimonio de la Humanidad desde el año 1999. Las llamas, que comenzaron en la segunda planta del inmueble, pudieron comenzar por un cortocircuito, aunque se desconoce su origen. El incendio, que por la tarde continuaba activo, no provocó daños personales, aunque los materiales son incalculables.
La Casa de Salazar, que es como se conoce el edificio, data del siglo XVII y forma parte de un conjunto histórico considerado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1999. Además es Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento desde 1983.
El fuego se inició en torno a las 12.00 horas en al biblioteca de la segunda planta del edificio, en la zona donde se encuentra la residencia privada del obispo Bernardo Alvarez. Afortunadamente, no se han producido daños personales a pesar de que en una sala cercana se encontraban reunidos los vicarios.
SIN PRECIO
Las llamas, que por la tarde seguían sin ser controladas a pesar del fuerte dispositivo desplegado para su combate, llegaron a la Universidad Nacional de Educación a Distancia. En las labores de extinción participaron dos helicópteros y más de 50 bomberos. Según declaró el presidente de Canarias, Adán Martín, aunque se desconocen las causas del siniestro, el origen más probable es un cortocircuito.
La alcaldesa de La Laguna, Ana Oramas, dio por perdido el edificio y el presidente del Cabildo de Tenerife, Ricardo Melchior, dijo, intentando hacer una valoración del siniestro que "hay cosas que no tienen precio".
