ALIAGA (TERUEL), 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
El teniente alcalde de la localidad turolense de Aliaga, Pedro Joaquín Sangüesa, aseguró hoy que desde su consistorio se solicitará al Gobierno central la declaración de zona catastrófica del área afectada por el incendio que se declaró el pasado miércoles, día 22 de julio, y que ha quemado unas 7.600 hectáreas.
Sangüesa afirmó que el incendio ha supuesto una "pérdida muy grande" porque se trata del "pulmón" a través del cual respiran los habitantes de Aliaga. Ahora, en invierno, "cualquier tormenta va destrozar todo el suelo, y va a arrastrar la ceniza a los ríos", indicó.
Por el momento, todos los esfuerzos se centra en lograr extinguir un fuego que se encuentra estabilizado pero que amenaza con reactivarse debido a las condiciones meteorológicas. "Después ya pensaremos en la repoblación y haremos un balance", dijo el primer teniente alcalde de la localidad.
Mañana, los alcaldes de los municipios afectados por los incendios se reunirán en Utrillas, sede de la Comarca de las Cuencas Mineras, con los presidentes de las comarcas para comenzar a evaluar la magnitud de la catástrofe.
El incendio ha arrasado numerosos campos de cereal y gran parte del arbolado, además, y ha supuesto la pérdida de numerosos animales que, probablemente, "si no murieron calcinados, lo hicieron asfixiados", señaló. Además, dos viviendas de segunda residencia se quemaron en el barrio de La Cañadilla, así como un árbol milenario, que si bien todavía no ha muerto, según los forestales se encuentra muy afectado, explicó Pedro Joaquín Sangüesa.
"Creemos que la zona quemada es recuperable a muy largo plazo y que la Administración va a tener que hacer algo", señaló Sangüesa, que añadió que "la despoblación de las zonas rurales también tiene mucho que ver en este asunto de los incendios".
"Normalmente son las personas autóctonas las que mantienen el monte, así como la ganadería que hace que los animales pasten", dijo, "habrá que hacer una inversión más seria en medidas contra los incendios", concluyó.
