"Estas víctimas han cometido el mismo delito que estos miles de jóvenes españoles: abandonar su país hacia otro para buscarse el pan", dice Meyer
BRUSELAS, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
El eurodiputado de Izquierda Unida Willy Meyer ha instado a la Comisión Europea a exigir a España que respete el derecho a la vida y salud de los inmigrantes tras la noticia "trágica" de la muerte de inmigrantes subsaharianos este jueves que intentaron entrar en la ciudad autónoma de Melilla y fueron recibidos "con gases lacrimógenos y pelotas de goma por parte de las fuerzas de seguridad del Estado español".
"No podemos tolerar más muertes. En esta ocasión, las Fuerzas de Seguridad del Estado se han visto salpicadas por unas órdenes que han provocado la muerte de personas. Los inmigrantes no son criminales y no es admisible escuchar como el Delegado del Gobierno criminaliza a unos seres humanos que huyen del hambre y la miseria", ha denunciado el eurodiputado de IU, cuya formación ya ha reclamado en España la dimisión del ministro del Interior, Jorge Fernández, por considerarle culpable de estas muertes.
Meyer ha instado a la Comisión a través de una pregunta parlamentaria a que exija a España que respete el derecho a la vida y la salud de los inmigrantes y que legisle a nivel europeo para obligar a los Estados miembros a proteger la vida de los inmigrantes.
"Llevamos trabajando mucho para que desde Bruselas se le exija a los Estados miembros de la Unión Europea que protejan la vida de los inmigrantes irregulares, estén o no sometidos a un procedimiento de retorno", ha subrayado el eurodiputado en un comunicado del partido.
Meyer ha dejado claro que "estas muertes no son accidentales sino que son el producto de los muros de esta Europa fortaleza en la que desean convertir a nuestro continente" y ha instado a no olvidar "cómo nuestros jóvenes están abandonando España para labrarse un futuro en otros países".
"Estas víctimas han cometido el mismo delito que estos miles de jóvenes españoles: abandonar su país hacia otro para buscarse el pan. Un pueblo debe tratar a los otros tal y cómo espera que los suyos sean tratados y ante esta masacre no podemos guardar silencio", ha concluido.
