MAPA y Medio Ambiente destinarán 2.409 millones de euros a la consolidación de los regadíos

Actualizado: viernes, 10 marzo 2006 19:18


MADRID, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los Ministerios de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y Medio Ambiente invertirán un total de 2.409 millones de euros en la ejecución de obras urgentes de mejora y consolidación de regadíos que permitirán obtener un ahorro de agua cercano a los 1.200 hectómetros cúbicos al año y paliar así los efectos de la sequía.

Este 'plan de choque' para el periodo 2006-2007 afectará a una superficie de 830.000 hectáreas, en zonas de baja eficiencia hídrica pero con un importante número de agricultores

De los 2.409 millones de euros, previstos en un real decreto aprobado hoy por el Consejo de Ministros, el MAPA aportará 711,5 millones y Medio Ambiente, 1.161 millones de euros, por lo que la inversión publica se elevará a un total de 1.872,5 millones de euros.

Los restantes 536,5 millones de euros serán aportados a los proyectos a través de las Sociedades Estatales de Estructuras Agrarias, las Sociedades Estatales de Agua, la empresa TRAGSA y las Comunidades de Regantes.

El 'plan de choque' contempla la mejora de las redes de transporte tanto en alta como en baja, la reparación de los elementos dañados, sustituyendo los que se han quedado obsoletos y la racionalización del trazado de las redes. Conjuntamente los proyectos previstos evitarán las pérdidas por evaporación favoreciendo el cambio de sistema de aplicación del agua por otros de mayor eficiencia y logrando con ello un ahorro de agua cercano a los 1.200 hectómetros cúbicos al año.

Las obras incluidas afectarán a una superficie de 830.000 hectáreas, en zonas de baja eficiencia hídrica pero con un importante número de agricultores, tendiendo estas actuaciones un carácter urgente a efectos de tramitación administrativa, especialmente en lo referente a la evaluación del impacto ambiental, reduciéndose sustancialmente los plazos previstos para su gestión.

El objetivo de estas actuaciones no sólo se reduce a obtener un ahorro de agua en las zonas objeto de la actuaciones, sino que también prevé la incorporación de recursos no convencionales al sistema de riego, como son las aguas procedentes de desalación y de depuración de aguas residuales de núcleos urbanos que, en determinadas zonas, con una permanente escasez de agua son imprescindibles.

Las Comunidades de Regantes cuyas zonas de riego sean objeto de un proceso de modernización deberán llevar a cabo un riguroso programa de vigilancia ambiental, ajustándose al cumplimiento de los distintos códigos de buenas prácticas agrarias y facilitando a la administración ambiental que lo requiera información al respecto, obtenida por los técnicos que realicen el seguimiento ambiental del regadío.

Las obras de modernización previstas representan, según el Gobierno, un esfuerzo necesario para anticiparse a la lucha contra los efectos de la sequía, mitigando sus consecuencias sobre el sector agrícola, afectado por la escasez pluviométrica durante el año hidrológico 2004-2005, con unas condiciones de sequía del 80% del territorio nacional.

Esta proporción se sigue manteniendo en los primeros meses de este año, en el que la reserva hídrica se situaba ya a mediados de enero en 14.340 hectómetros cúbicos, cifra que supone una disminución de cerca de veinte puntos porcentuales en los recursos disponibles sobre la media de los últimos diez años, situación que con las medidas previstas se intenta paliar, evitando que se produzcan insuficiencias en las próximas campañas de riego.