El ministro de Justicia defiende el tratamiento con inhibidores del deseo sexual para pederastas no rehabilitados

EP
Actualizado: viernes, 6 junio 2008 13:55


MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, es partidario del uso de medicamentos inhibidores del deseo sexual, bajo prescripción médica, para pederastas cuya rehabilitación, una vez cumplida su pena, no esté asegurada y asegura que el proyecto de ley que su equipo prepara y que se presentará el próximo otoño establecerá "posibilidades para que los profesionales puedan aplicar el tratamiento que convenga" en cada caso.

En una entrevista publicada hoy en el diario 'Expansión' y recogida por Europa Press, el ministro explica que no le gusta "hablar de 'castración química', porque induce a error", pero defiende que "hay medicamentos que inhiben el deseo sexual y funcionan para algunas personas".

Además, Bermejo indica que, para mejorar la lucha contra los delincuentes sexuales, habrá que "ver si hay que elevar las penas; afinar el sistema para que no salga nadie de prisión hasta el último día, si no tiene un buen pronóstico; y que cuando no haya ese pronóstico, se contemple la prolongación del control después de la liberación". Este "control", explicó, pasaría por "obligar a seguir un tratamiento y poner los medios para que eso ocurra".

El ministro reconoce que la Justicia española "tiene un problema grave de lentitud endémica", aunque sostiene que no se puede hablar de "parálisis". A su juicio, la solución pasa por llegar a "la justicia digital".

En este sentido, asegura que el presupuesto de Justicia "va a aumentar significativamente en 2009" y el Ministerio de Industria va a dotarle de "fondos para la informatización".

PACTO CON EL PP

Asimismo, Bermejo se refiere a las conversaciones sobre Justicia con el PP, que, en su opinión, están yendo "bien". No obstante, a pesar de que asegura que le "gusta" el pacto con el PP, porque juntos suman "el 90% del Parlamento", cree que habría que "hacer un esfuerzo por incluir otras sensibilidades".

Para el ministro, el acuerdo entre los dos principales partidos sobre esta cuestión podrá tener lugar "cuando el PP tenga resueltos sus problemas internos".

Por otra parte, el ministro asegura que "la aventura disgregadora" del lehendakari Juan José Ibarretxe con su proyecto de consulta "jurídicamente carece de recorrido" y va a acabar "en la nada". "Si logra el apoyo de la Cámara (vasca) la vamos a impugnar al día siguiente ante el TC, lo que significa por ley suspensión inmediata", señala.

Asimismo, afirma que el Gobierno va a "utilizar a tope" las herramientas para impedir "que nadie se presente bajo la marca de los partidos ilegalizados" en las próximas elecciones autonómicas vascas.