BILBAO, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del PSE-EE, José Antonio Pastor, deseó que desde hoy, tras la toma de posesión de José Ignacio Munilla como nuevo obispo de San Sebastián, se recomponga en Euskadi "lo que haya podido haber de heridas o polémica" a raíz de su designación.
En declaraciones a Radio Euskadi, recogidas por Europa Press, Pastor reiteró la postura de su formación de "no entrar en las decisiones internas que adopte la Iglesia, independientemente del carácter más o menos conservador que pueda tener cada uno de los obispos".
Admitió, en este sentido, que el nuevo prelado está "perfectamente caracterizado en lo político". Sin embargo, consideró que la "polémica" de los párrocos guipuzcoanos con Munilla no se debe a "considerarlo conservador", sino "a considerarlo poco nacionalista".
"Porque yo no conozco muchas manifestaciones públicas de los obispos vascos en contra de las pastorales sociales de la Iglesia, sino en otros aspectos, "más relacionados con la identidad de país" y "no tanto en el aspecto social".
Pastor pidió, por otra parte, que, "independientemente del conflicto que haya provocado en el sentimiento o mentalidad de determinados fieles o párrocos guipuzcoanos", se trata de "recomponer lo que haya podido haber de heridas o polémica". "Y la Iglesia vasca, que es un elemento importante de nuestra sociedad, se haga con un cierto cima de normalidad", agregó.
Además, dijo tener "la impresión", por las declaraciones de "algunos dirigentes del PNV" de que "se quiere poner un poco de calma y cautela". "También desde el propio señor Munilla parece que se quiere ir por ahí", concluyó.
