MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
El borrador del Gobierno sobre las enseñanzas mínimas en Secundaria plantea que los niños que no estudien Religión ni Historia de las religiones podrán irse a casa si el centro educativo así lo establece. Esta posibilidad fue anunciada hoy por el secretario general de Educación, Alejandro Tiana, en una rueda de prensa tras reunirse con los consejeros de las comunidades autónomas para debatir sobre esta materia. El consejero de Educación matizó que todas las posibilidades para resolver esa cuestión están abiertas subrayando no obstante que el centro debe regularlas.
La Religión sigue siendo uno de los temas más controvertidos en la reforma educativa que está llevando a cabo el Gobierno. Tras acordarse que serán los propios centros los que decidirán en qué franja horaria impartirán la materia, se ha dado un paso más, que sigue dejando la cuestión muy poco atada y al albur de cada centro escolar.
Los niños podrán escoger entre estudiar Religión, Historia de las Religiones o hacer cualquier actividad que el centro establezca siempre que se les de la adecuada atención educativa. Entre esas posibilidades está la de que lo niños simplemente se marchen a casa siempre que el centro lo prevea así.
ADECUADA ATENCIÓN
El borrador únicamente establece que en el caso de que los menores no cursen ninguna de las dos materias tendrán "la adecuada atención educativa" por lo que el centro no podrá desentenderse de ellos, aunque no especifica qué atención se les dará.
El tema sin duda despertará reacciones en contra teniendo en cuenta que las dos asignaturas anteriores serán evaluadas y contarán para pasar o repetir curso, aunque el secretario de Estado insistió en que este planteamiento responde al principio constitucional de ofertar la formación religiosa y moral que deseen las familias.
Tiana de hecho cree que esta es una solución "muy razonable juzgando las peticiones y los distintos puntos de vista" y no respondiendo a una exigencia concreta de ningún agente o sector educativo. Para el Departamento que dirige Mercedes Cabrera, consiste en una opción de atención a la diversidad con el respeto a todos y sin comportar obligaciones para nadie.
A pesar de que el reglamento de desarrollo de la Ley Orgánica de Educación (LOE) en esta etapa no fija quién impartirá esta versión aconfesional de las religiones, Tiana indicó que hay ciertos colectivos que pueden tener una formación más idónea, como los de Ciencias Sociales, Geografía e Historia o Filosofía.
