MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), José María Gil Tamayo, ha indicado que "nunca en un diálogo hay puertas cerradas", al ser preguntado por si estarían dispuestos a aceptar que la clase de Religión perdiera su carácter evaluable, es decir, que no contara para nota, aunque ha precisado que lo que es "innegociable" es la presencia de la asignatura en el marco escolar.
"Nunca en un diálogo hay una puerta cerrada", ha precisado Gil Tamayo, en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Comisión Permanente de los obispos españoles. "Pero tenemos que saber qué quieren", ha agregado, para mostrar la disponibilidad de los prelados al diálogo.
Si bien, ha puntualizado que los obispos enviaron una solicitud de entrevista "hace un tiempo" a la ministra de Educación, Isabel Celaá, y que aún no han recibido respuesta.
En cualquier caso, el portavoz de los obispos ha avisado de que hay "cosas innegociables" como "la presencia de la materia de Religión en el marco escolar" y ha aclarado que esta clase "no es catequesis".
"Hay que huir de prejuicios y de ideologización. Cuando se quiere hacer de la escuela un campo de experimento no nos pondremos de acuerdo, pero si vamos desde razones y derechos, sí habrá", ha zanjado.
