Papa Francisco
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Publicado: martes, 6 febrero 2018 15:19

La secretaria general de Cáritas España propone "modelos equitativos y justos"

ROMA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Papa Francisco ha advertido de la violencia contra los migrantes y contra todos aquellos a los que se considera "una amenaza", en su mensaje de Cuaresma. Aunque el texto fue firmado por el Pontífice el pasado 1 de noviembre, su publicación este martes 6 de febrero coincide con el reciente ataque neonazi en Italia, ocurrido hace tres días, en el que seis migrantes fueron tiroteados.

"Lo que apaga la caridad es ante todo la avidez por el dinero, 'raíz de todos los males'; a esta le sigue el rechazo de Dios y, por tanto, el no querer buscar consuelo en él, prefiriendo quedarnos con nuestra desolación antes que sentirnos confortados por su Palabra y sus Sacramentos. Todo esto se transforma en violencia que se dirige contra aquellos que consideramos una amenaza para nuestras 'certezas': el niño por nacer, el anciano enfermo, el huésped de paso, el migrante, así como el prójimo que no corresponde a nuestras expectativas", precisa el Pontífice.

El texto ha sido presentado por la secretaria general de Cáritas Española, Natalia Peiro, el prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, el cardenal Peter Turkson, y el oficial del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, Krzysztof Marcjanowicz.

En el mensaje, titulado 'Al crecer la maldad, se enfriará el amor en la mayoría', Francisco invita a los fieles a prescindir de los "placeres momentáneos", "del afán de lucro" y de "la vanidad" porque son amenazas a una vida plena que ponen en riesgo "la dignidad", "la libertad" y "la capacidad de amar".

Además, el Papa alerta en su mensaje para la Cuaresma --que para los católicos representa el periodo de cuarenta días antes de Semana Santa--, de los falsos profetas, a los que ha comparado con "encantadores de serpientes" que se aprovechan de las "emociones humanas para esclavizar" y poner en el centro al "placer momentáneo, que se confunde con la felicidad".

"Falsos profetas son esos charlatanes que ofrecen soluciones sencillas e inmediatas para los sufrimientos, remedios que sin embargo resultan ser completamente inútiles: cuántos son los jóvenes a los que se les ofrece el falso remedio de la droga, de unas relaciones de usar y tirar, de ganancias fáciles pero deshonestas. Cuántos se dejan cautivar por una vida completamente virtual, en que las relaciones parecen más sencillas y rápidas pero que después resultan dramáticamente sin sentido", subraya el Pontífice.

Además, critica en particular el "engaño de la vanidad". "Lleva a pavonearnos haciéndonos caer en el ridículo; y el ridículo no tiene vuelta atrás", advierte. Para el Papa los falsos profetas presentan "el mal como bien y lo falso como verdadero, para confundir el corazón del hombre". Por ello ha invitado a "discernir y a examinar en el corazón si se siente amenazado por las mentiras de estos falsos profetas".

"Tenemos que aprender a no quedarnos en un nivel inmediato, superficial, sino a reconocer qué cosas son las que dejan en nuestro interior una huella buena y más duradera, porque vienen de Dios y ciertamente sirven para nuestro bien", señala.

LO QUE ENFRÍA EL CORAZÓN

Francisco señala que la Cuaresma es un tiempo de preparación y conversión que debe hacerse "con todo el corazón" y "con toda la vida" e invita no solo a los fieles católicos, a reflexionar sobre aquellas cosas que enfrían el corazón.

De este modo, alerta contra el encanto de la "ilusión del dinero", que hace a las personas "esclavas del lucro" o de "intereses mezquinos" y reflexiona sobre "cuantos viven pensando que se bastan a sí mismos y caen presa de la soledad". Frente a esto el Papa propone "el dulce remedio de la oración, la limosna y el ayuno".

"El hecho de dedicar más tiempo a la oración hace que nuestro corazón descubra las mentiras secretas con las cuales nos engañamos a nosotros mismos, para buscar finalmente el consuelo en Dios. Él es nuestro Padre y desea para nosotros la vida", determina.

Sobre el ejercicio de la limosna, precisa que "libera de la avidez" y ayuda a descubrir "que el otro es hermano". "Nunca lo que tengo es sólo mío. Cuánto desearía que la limosna se convirtiera para todos en un auténtico estilo de vida", subraya.

En cuanto al ayuno, el Pontífice apunta que "debilita la violencia" en cuanto que es un elemento que "desarma y constituye una importante ocasión para crecer". "Nos permite experimentar lo que sienten aquellos que carecen de lo indispensable y conocen el aguijón del hambre", agrega.

Por otro lado, denuncia el poco cuidado a la ecología para señalar que "la Tierra está envenenada a causa de los desechos arrojados por negligencia e interés" al tiempo que menciona "la acedia egoísta, el pesimismo estéril, la tentación de aislarse y de entablar continuas guerras fratricidas, la mentalidad mundana que induce a ocuparse sólo de lo aparente, disminuyendo de este modo el entusiasmo misionero".

CÁRITAS SE "REBELA CONTRA LA DESIGUALDAD"

Durante la presentación en el Vaticano, la secretaria general de Cáritas España, Natalia Peiro, ha defendido la labor de esta organización católica que es "gozo en la verdad de quien lucha contra la injusticia y se rebela contra la desigualdad".

También señala cuáles son las principales áreas de acción: los refugiados, las consecuencias de la trata de personas, los efectos de la sostenibilidad medioambiental, la lacra de la violencia contra las mujeres, ancianos y niños, la precariedad laboral o la falta de unos recursos mínimos para satisfacer con dignidad las necesidades básicas.

Para combatir estas realidades Peiro ha dicho que son necesarias "respuestas cercanas, rápidas, eficaces y de calidad" que caminen de la mano de propuestas constructivas para impulsar unos modelos sociales realmente equitativos y justos. Sobre el periodo de Cuaresma ha destacado que "es un momento propicio para compartir los gozos y alegrías e incertidumbres del mundo".

Por su parte, el cardenal Turkson ha defendido que "la no violencia no puede limitarse solo a la retórica contra la guerra y la violencia física" sino que se debe poner en práctica un "programa de promoción de la dignidad de las personas en todas las formas en las cuales se manifiesta.

De este modo, ha evidenciado que cualquier actitud o gesto que manifieste "algo en contra de la dignidad de la persona" se traduce en "violencia contra la persona". "Cuando una mujer o un hombre no tienen nada para comer, es una forma de violencia; cuando en la ciudad hay exclusión, es violencia también", ha indicado Turkson. Finalmente, el cardenal ha señalado que el mensaje del Papa invita a respetar "la dignidad de las personas" y a hacer todo lo posible por "promover sus derechos".

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