ROMA, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha denunciado en el paseo marítimo de Bari (sur de Italia) el silencio y la complicidad ante el sufrimiento de cristianos en Oriente Próximo en un acto con los patriarcas orientales y algunos líderes de las comunidades ortodoxas.
"Sobre esta espléndida región se ha concentrado una densa nube de tinieblas de guerra, violencia y destrucción, ocupaciones y diversas formas de fundamentalismo, migraciones forzosas y abandono, y todo esto en medio del silencio de tantos y la complicidad de muchos", ha exclamado Francisco al referirse a las persecución de las minorías religiosas, entre ellos los cristianos, en esta zona.
El Pontífice ha reivindicado la esencia cristiana de Tierra Santa y de toda la gran región donde tuvieron lugar los acontecimientos que narran el Antiguo y el Nuevo Testamento mientras que ha lamentado el éxodo de cristianos.
"Oriente Próximo se ha vuelto una tierra de gente que deja la propia tierra. Y existe el riesgo de que se extinga la presencia de nuestros hermanos y hermanas en la fe, desfigurando el mismo rostro de la región, porque un Oriente Próximo sin cristianos no sería Oriente Próximo", ha manifestado.
Francisco ha llegado en helicóptero a primera hora de la mañana a la capital de la región de Apulia. Allí se ha reunido con los participantes del encuentro en la basílica pontificia de San Nicolás, donde se custodian desde el siglo XI los restos de este santo, patrón de Rusia.
Después han protagonizado un acto de oración por la paz en Oriente Próximo y el ecumenismo, y en particular por los cristianos perseguidos en aquella región. El Papa ha lamentado que estas personas vivan "en una situación de gran sufrimiento" y les ha asegurado su cercanía.
"La indiferencia mata, y nosotros queremos ser una voz que combate el homicidio de la indiferencia. Queremos dar voz a quien no tiene voz, a quien solo puede tragarse las lágrimas, porque hoy Oriente Próximo llora, hoy sufre y calla, mientras otros lo pisotean en busca de poder y riquezas", ha concluido.
