Las principales ciudades españolas muestran su repulsa a la violencia machista

Actualizado: domingo, 25 noviembre 2007 20:29


MADRID, 25 Nov. (OTR/PRESS) -

El Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres sirvió hoy para que miles de ciudadanos españoles salieran a la calle en las principales capitales de provincia para mostrar su firme condena a la violencia machista y recordar a las 69 mujeres asesinadas por sus parejas o ex parejas en lo que va de año. La repulsa también llegó por parte de los principales dirigentes políticos y de destacados miembros de la cultura y la sociedad de nuestro país que apoyaron las distintas movilizaciones, y que realizaron sus propias propuestas para erradicar el problema. Por parte del PP, la secretaria ejecutiva de Política Social del partido, Ana Pastor, propuso una reforma del Código Penal para que la "vulneración de una orden de alejamiento sea tipificada como un delito específico" y así luchar contra la "lacra social que es la violencia de género".

En Madrid, el acto obtuvo la respuesta de varios actores y pasacalles que amenizaron la protesta que tuvo lugar frente al Museo Nacional Reina Sofía, y tras cuya finalización, la actriz Pilar Bardem dio lectura a un manifiesto elaborado por Amnistía Internacional, organización que convocaba la concentración. Bardem denunció que todo el mundo "sufre violencia grave alguna vez en su vida", y recordó que es durante los conflictos armados "cuando la violencia amenaza a las mujeres con más fuerza y de múltiples formas".

Por ello exigió a las autoridades que actúen para solucionar el problema, "ante la falta de voluntad política de Gobiernos que no garantizan la protección de sus derechos frente a la violencia que más a menudo las golpea, la ejercida por los hombres de su propia familia". La actriz quiso denunciar especialmente, la violencia que sufren las mujeres inmigrantes ya que éstas están "doblemente amenazadas por su condición de mujer y de recién llegadas a una tierra extraña".

Pero la de Madrid no fue la única concentración celebrada en España para condenar la violencia machista. En Sevilla, unas 2.500 personas se reunieron en la Plaza Nueva para protestar contra lo que consideraron "una lacra social" que "se perpetúa con la misma brutalidad y perseverancia" que hace años, según denunció la portavoz de la plataforma organizadora '8 de marzo', Rosario Luque, que participó en un acto en el que decenas de mujeres tiñeron sus pies de rojo sangre y dejaron su huella en el suelo de la capital andaluza.

PRESENCIA DE UN MALTRATADOR EN LA CONCENTRACIÓN DE CÓRDOBA

Más numeroso fue el acto convocado por la Plataforma Cordobesa contra la violencia de Género, que reunió a más de 5.000 personas en Córdoba, y que tal y como aseguró la presidenta de la Plataforma, Carmen León, transcurrió de forma "tranquila" pese a que un presunto maltratador acudió a dicha concentración en busca de su mujer pese a tener una orden de alejamiento, por lo que varios asistentes acompañaron a la víctima a denunciar los hechos a la comisaría de la Policía Local.

A la concentración que tuvo lugar en Zaragoza asistieron unas 700 personas que condenaron la violencia machista a la que deben enfrentarse numerosas mujeres, y que contó con la presencia de la responsable en el secretariado de la Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza, Nieves Boj Martínez, que quiso hacer un "llamamiento a que ninguna mujer pase por alto que se le está maltratando" y a que "denuncie desde el primer grito". Por otro lado, miles de ciudadanos mostraron su rechazo a la violencia en sendos actos de repulsa celebrados en Valladolid, Vigo, Palma de Mallorca, Pamplona, Logroño, Mérida y León, entre otros.

CENTRARSE EN LAS MEDIDAS DE AYUDA

Por parte del Gobierno, la delegada especial contra la Violencia sobre la Mujer, Encarnación Orozco, aseguró que afrontar la problemática de la violencia de género sólo desde la perspectiva de las cifras de víctimas "sólo provoca miedo y terror", por lo que abogó por destacar las medidas de ayuda que las víctimas tienen a su disposición.

Orozco mencionó pues las numerosas llamadas recibidas en el 016 desde su puesta en marcha donde "lo que se les ofrece es principalmente asesoramiento jurídico, aunque desde la empatía, porque este no es un teléfono de emergencia o de denuncia". Para la encargada de velar por la seguridad y la integridad de las mujeres "lo primero es que reconozcan que sufren el problema, aunque en el fondo ellas ya lo saben, y luego, indicarles todas las ayudas con las que cuentan", como "la reducción de jornada laboral, acuerdos de inserción, ayudas económicas, etc...".

REFORMA DEL CÓDIGO PENAL

Por su parte, la secretaria de políticas sociales del PP, Ana Pastor, fue más allá y propuso una reforma del Código Penal para que la "vulneración de una orden de alejamiento sea tipificada como un delito específico y que además sea penmado con la pena máxima" para luchar contra la "lacra social que es la violencia de género". Para la dirigente popular "algo se está haciendo mal en nuestro país cuando tenemos un balance de 69 mujeres muertas y de cientos de miles de personas víctimas de violencia de género".

Para Pastor, el balance tiene "muchos puntos oscuros" como la falta de medios en los juzgados, la dificultad de las mujeres víctimas a optar a un "puesto de trabajo", la carencia de "medios económicos" o el incumplimiento de iniciativas como el teléfono de ayuda directo o el "plan personalizado" de atención a las maltratadas. En consecuencia anunció que el PP incluirá en su programa electoral la propuesta de "un préstamo a interés cero para todas las mujeres víctimas de la violencia" para que éstas "puedan iniciar una nueva vida". Además instó a que "el consumo de alcohol y de drogas" no sea considerado un "atenuante" que exima a los agresores de la culpabilidad de una muerte.

Ayer mismo, la Ertzaintza detenía a un joven de 27 años en Sopelana (Vizcaya) por agredir a su ex pareja en plena calle tras quebrantar una orden de alejamiento impuesta por un juez tras recibir una denuncia de su ex compañera sentimental que denunció los hechos.