OVIEDO, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
Don Felipe de Borbón ensalzó hoy en el teatro Campoamor de Oviedo los valores que sustentan a la Fundación Príncipe de Asturias y sus galardones. Unos valores que, según el Príncipe de Asturias, han alentado "la generosidad sobre el egoísmo, la concordia sobre la división, la convivencia sobre el fanatismo y el compromiso sobre la indiferencia".
Para Don Felipe, los Premios y la Fundación, cuya labor ha sido posible desarrollar gracias al "marco de libertad y estabilidad que garantiza la Constitución", representan además "las mismas virtudes que han guiado la vida de los españoles durante los últimos años: determinación y prudencia, firmes convicciones, fe y confianza en nuestro proyecto común".
El Príncipe también valoró el apoyo obtenido por la institución asturiana --que en pocas semanas clausurará los actos conmemorativos de su vigésimo quinto aniversario-- de la "inmensa mayoría de los españoles" que consideran a los galardones "un gran patrimonio cultural y moral de España ante el mundo". Y especial mención hizo don Felipe, en su discurso de entrega de los galardones, al respaldo que siempre brindó la Corona a la institución asturiana por su "permanente impulso a la Cultura".
"La labor concebida al servicio de España, de nuestro progreso y proyección exterior como gran nación fue la razón primordial que inspiró al Rey en su activo respaldo al nacimiento de esta Fundación", dijo el Príncipe.
Apuntó, además, la necesidad de transmitir a los más jóvenes los valores que ha defendido la Fundación "para que se engrandezcan con ellos, se alejen de toda posible desesperanza y se sumen con ilusión a la gran aventura de la vida en paz, plenitud y responsabilidad".
Asimismo, expresó, tras recordar a Julián Marías, su compromiso, junto con el de la Princesa --presente en el acto--, de transmitir a sus hijos el "inmenso caudal de emociones y enseñanzas" para que "crezcan en sus corazones la esperanza, el anhelo de un mundo más justo, la búsqueda incansable y comprometida de una humanidad de hombres y mujeres libres".
El Príncipe animó a la Fundación a "mirar hacia delante, hacia el futuro y creer en lo que se está haciendo.
RECONOCIMIENTO A LOS PREMIADOS
A la hora de referirse en su discurso a los premiados, destacó de la totalidad de los galardonados su preocupación por conocer mejor al ser humano, su entorno y la promoción de "valores, modelos de comportamiento solidario que han logrado hallazgos notables al servicio del progreso de la ciencia, o que han buscado la sensibilidad expresiva y estética".
De la Fundación Bill y Melinda Gates (Cooperación Internacional), el Príncipe reconoció su "liderazgo en el esfuerzo en favor de lo seres humanos, especialmente niños, víctimas de la enfermedad, la guerra, la injusticia y la miseria, con dedicación prioritaria al continente africano".
El Príncipe aseguró que la labor del matrimonio, que delegó en el padre del presidente de Microsoft William H.Gates, la recogida del galardón, supone "un gesto de filantropía sin precedentes" y "un gran ejemplo de desprendimiento" además de mostrar "la verdadera índole de la pobreza extrema, su inutilidad, su irracionalidad, la injusticia de su misma existencia".
Don Felipe tuvo también palabras para la National Geographic (Comunicación y Humanidades) que se ha convertido en "una luz que ilumina y ayuda a limpiar el hermoso mundo que se nos ha concedido". La organización es, según el Príncipe, "una ventana abierta a un mundo que deseamos persevere en su maravillosa riqueza, complejidad y hermosura".
ORIGINALIDAD Y CAPACIDAD DE CREACIÓN DE ALMODÓVAR
De Pedro Almodóvar (Artes) destacó su "originalidad y capacidad de creación" que "han atravesado fronteras y cautivado a millones de espectadores de todo el mundo". Y de sus películas valoró especialmente los "retratos valiosísimos de la condición humana tratados genuinamente por su personalidad creadora".
Todo ello hace que "el galardón exprese el alto reconocimiento a un gran director de cine ya consagrado", dijo el Príncipe, pero a la vez "sirve de aliento a los empeños y realizaciones de tantos jóvenes e ilusionados profesionales del Séptimo Arte en nuestro país".
Juan Ignacio Cirac (Investigación Científica y Técnica) supone, según el Príncipe, un ejemplo que "enaltece y anima a todos los que aman la ciencia y supone un potente estímulo para los investigadores de nuestro país".
De Cirac destacó don Felipe su "labor, su juventud y la dimensión de sus conocimientos" que invitan a "seguir consolidando un futuro mejor para las ciencias y la investigación en España, cada vez con mayor aprecio y apoyo en la sociedad como uno de los factores determinantes para nuestro progreso económico y social". Recordó además la admiración que cinco Premios Nobel de física han demostrado por las investigaciones del español en el campo de la información cuántica.
El Príncipe resaltó de Paul Auster (Letras) su sabia maestría e inteligencia con la que "ha conseguido transmitir sus preocupaciones y sus deseos, contando historias cargadas de misterio e incluso de elementos inverosímiles". De su obra, se refirió al tratamiento de temas eternos y universales como la soledad, la contingencia del ser humano o la muerte "gracias a un discurso de absoluta libertad".
La labor de Mary Robinson (Ciencias Sociales) tiene un rasgo característico para el heredero de la Corona como es "su compromiso permanente con los valores de la cultura y con el esfuerzo tenaz para extender los derechos humanos en el mundo".
En su opinión, la ex Presidenta de Irlanda y ex Alta Comisonada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, representa también "a hombres y mujeres que han sabido unir la modernidad a los valores depurados por los siglos" contribuyendo a hacer "de nuestro mundo un espacio más abierto y humano".
El Príncipe puso especial énfasis a la hora de hablar de la Selección Nacional de Baloncesto (Deportes) por su alto ejemplo "que permanecerá imborrable en la historia del deporte y especialmente entre quienes lo amamos y practicamos". Don Felipe considera que en el equipo se han conseguido aunar durante tiempo "mucho tesón, una admirable unidad con su entrenador y una gran cohesión".
La Selección Española, representa para el Príncipe, a "un grupo de buena gente que se reúnen para hacer buenas cosas y cuyo objetivo es hacer feliz a todo un país".
El premio de la Concordia adquirió este año "su dimensión más entrañable y más plena" con su concesión a Unicef. "Ninguno de los problemas que padece la Humanidad nos conmueve tanto como aquellos que afectan a la infancia", dijo el Príncipe.
Con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia, la Fundación, concluyó don Felipe en su discurso, pretende reconocer el esfuerzo que esta organización realiza para "paliar la triste realidad de los niños enfermos, para erradicar la dolorosa situación que aún viven, en pleno siglo XXI, tantos niños maltratados, explotados y hambrientos".
