El Príncipe Felipe anima a los jóvenes a conservar la tradición como "depositarios" de la riqueza cultural

Actualizado: sábado, 21 octubre 2006 19:58


OVIEDO, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Príncipe de Asturias se dirigió hoy a los jóvenes y niños durante su discurso en el pueblo de Sariego, donde asistió para entregar la distinción al 'Pueblo Ejemplar de Asturias 2006'. Ellos, dijo, "son los depositarios de todos los esfuerzos y serán los herederos de la riqueza que estáis labrando día a día".

El heredero de la Corona llegó en torno a las 12.00 horas a la citada localidad, donde fue recibido entre aplausos por multitud de vecinos que se congregaron en la plaza central. Allí, tras leer el acta del jurado, que este año eligió a Carriego como 'Pueblo Ejemplar', Don Felipe pronunció su discurso en el que, en más de una ocasión se dirigió a los jóvenes, a quienes sugirió que "aprovechen las ventajas y oportunidades que les genera la vida en libertad", dijo.

Durante su discurso, el Príncipe Felipe disculpó la ausencia de Doña Letizia, que ayer decía volver a Madrid a causa de las molestias del embarazo, y tras elogiar las cualidades de Sariego dijo imaginarse como sería su vida "en vuestro concejo, que la Princesa conoce y aprecia en toda su belleza".

Además se refirió a la industria de la sidra, "una de vuestras más antiguas riquezas y que a través de vuestras asociaciones habéis puesto en marcha y mantenido a lo largo de los años", y destacó el privilegio de poder mantener ventajas de la vida en el campo con las extraordinarias oportunidades del mundo en que vivimos. "Somos testigos de como las comunidades rurales reducen sus desigualdades con respecto a las urbanas en posibilidades de educación, comunicación y oportunidades", afirmó.

El Príncipe de Asturias tuvo que interrumpir la última parte de su discurso, al sufrir uno de los miembros del jurado que otorga esta distinción un repentino desmayo. Su Alteza, después de saludar a los asistentes, se acercó hasta la ambulancia para interesarse por el estado de esa persona, que finalmente no sufrió ninguna consecuencia más que el propio desmayo.

Tras la intervención de Don Felipe, el alcalde de Sariego, Francisco Javier Parajón, fue el encargado de intervenir, asegurando que se ven "como un pueblo cargado de ilusión y fuerza para trabajar por sus vecinos, sus amigos y su familia". Además, pidió a Don Felipe que transmitiese a su hija el cariño de todo el pueblo.

Una vez finalizadas las intervenciones y descubierta la placa conmemorativa, la comitiva integrada entre otros por el presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces; la presidenta de la Junta, María Jesús Álvarez, y el delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín, se dirigió al campo de fútbol de la localidad.

Por el camino el Príncipe recibió aplausos que devolvió con saludos a los asistentes, llegando incluso a acercarse a una vivienda para poder saludar a un bebé que estaba con su abuela. Ya en el campo de fútbol, Don Felipe presenció una amplia exhibición de deportes rurales. El heredero de la Corona se atrevió incluso a participar en la corta de troncos y más tarde degustó un 'culín' de sidra dulce.

Como no podía ser de otro modo, Don Felipe recibió en su visita a Sariego varios regalos para su futuro hijo y también para Leonor. Así, una de las mujeres que participaba en la corta de mazorcas obsequió al Príncipe. Unos patucos "para lo que venga" y para la Infanta Leonor unos escarpines, y un par de zapatos típicos para el baile regional, fueron otros de los regalos recibidos por el Príncipe.

Desde el campo de fútbol la comitiva, presidida por el Príncipe de Asturias, se dirigió al colegio de la localidad donde les esperaban medio centenar de niños. Después, Don Felipe firmó libro de honor del ayuntamiento, poniendo así fin a su visita a la localidad.