Ricardo Suárez, presunto asesino del celador pasa mañana a disposición del juzgado de instrucción

Actualizado: domingo, 22 enero 2006 19:51


SEVILLA, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -

El presunto asesino del celador del Hospital Virgen del Rocío que fue tiroteado el pasado día 8 de enero, después de atropellar a la hija del primero, sin causarle daños graves, pasará mañana a disposición judicial en el juzgado de instrucción número 18 de Sevilla, según informó a Europa Press el abogado de la familia, Francisco Javier del Rey.

Ricardo Suárez fue detenido en la noche del pasado viernes por la Policía, en la localidad onubense de Ayamonte, tras entregarse voluntariamente, algo que pactó con su abogado mediante una conversación telefónica.

El pasado jueves día 19, el sospechoso, Ricardo Suárez, se puso en contacto telefónico con el letrado para interesarse por su mujer y madre de la niña, María Luisa C. J., que permanece en la cárcel de Sevilla II en prisión preventiva.

Durante el transcurso de la conversación, según explicó, el abogado intentó persuadir a Ricardo de que se entregara a las autoridades, a lo que éste accedió poniendo como condición que fuera el mismo letrado el que se desplazara para recogerlo a Oporto (Portugal), en donde el fugitivo de la justicia se hallaba acogido en casa de unos familiares lejanos.

El abogado informó de que a las 08.00 horas del viernes partió, en compañía de la Policía, hacia la frontera Ayamonte, lugar en el que "me separé de ellos para emprender el viaje hacia Oporto". Según dijo, el acusado no estaba finalmente en esta ciudad lusa, sino que "antes de llegar a Oporto recibí una llamada de él diciendo que se encontraba en Ovar, un pueblo cercano".

Durante el camino de vuelta, el abogado pudo confirmar que el acusado "se confundió de persona" cuando disparó a Gaspar G., ya que, "según le contó Ricardo al periodista que les acompañó", pensó que se trataba "de un miembro de un clan gitano rival que iba a matar a su familia".

En este sentido, Del Rey hizo constar "el arrepentimiento más absoluto de este hombre, que no hacía más que quejarse de su situación y arrepentirse de este hecho lamentable". También indicó que "pidió perdón a la familia y a todo el mundo" y adelantó que el acusado tiene la intención de hacerlo públicamente "en cuanto tenga oportunidad".

Por su parte, Ricardo Suárez, además de exculpar a su mujer del crimen, aseguró que cuando disparó contra el celador estaba borracho y que creyó que la niña estaba muerta como consecuencia del atropello.