Mariano Arroyo iba a llegar a su pueblo de vacaciones este mismo fin de semana
CABEZÓN DE LA SAL, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
Una sobrina del sacerdote cántabro asesinado el pasado lunes en Cuba, Mariano Arroyo, Charito Puente, aseguró hoy que la muerte del sacerdote ha sido "una terrible noticia" puesto que esperaban "tenerlo aquí" de vacaciones aunque les "conforta" la fe que ha trasmitido a toda la familia.
Familiares y amigos del sacerdote cántabro asesinado en Cuba, Mariano Arroyo, velaron esta mañana su cuerpo en la capilla ardiente instalada en la residencia de mayores de Carrejo en Cabezón de la Sal (Cantabria), a la que acudieron numerosos vecinos para transmitir sus condolencias a la familia.
En declaraciones a Europa Press, su sobrina indicó que llevaba casi once años en Cuba donde estaba "muy contento" hasta el punto de que "unos años antes de estar en Regla" pensaba volver definitivamente a España pero "el Cardenal le pidió que se ocupara de la parroquia". El sacerdote decidió quedarse y transmitió a la familia que "su final iba a ser en Cuba".
En relación a los hechos que han envuelto a la muerte del sacerdote su sobrina señaló que la familia sólo sabe "lo que ha salido en prensa" y respecto a los pasos a seguir manifestó que aún están "con el shock y desbordados". "Cuando esto pase nos iremos serenando y sabremos qué es lo debemos hacer", apuntó.
Charito Puente recordó que Arroyo pensaba llegar a Cabezón de la Sal "este mismo fin de semana". "Tenía ya el billete y había hablado con mi hermana precisamente hace una semana", indicó. Al parecer, tenía "muchas ganas de venir" para huir del calor de Cuba y esperaban tenerlo "hoy aquí con nosotros".
