El Tribunal Supremo confirma los 142 años de prisión para el 'asesino de la Baraja'

Actualizado: viernes, 10 marzo 2006 23:01


MADRID, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -

El 'asesino de la Baraja' tendrá que cumplir finalmente 142 años de prisión tras el fallo del Tribunal Supremo, que ratifica la pena impuesta por la Audiencia Provincial de Madrid. El Alto Tribunal ha desestimado tanto los recursos interpuestos por la Defensa de Alfredo Galán como los de los particulares, que querían que el Estado fuera responsable de los asesinatos del ex militar. Galán mató a seis personas entre enero y marzo de 2003 e intentó asesinar a otras tres.

La Audiencia Provincial condenó a Alfredo Galán en marzo de 2005 a 142 años y tres meses de cárcel como autor de un delito de allanamiento de morada, uno de tenencia ilícita de armas, seis asesinatos consumados y tres en grado de tentativa, hechos ocurridos entre enero y marzo de 2003.

El Tribunal consideró probado que Galán adquirió una pistola Tokarev del calibre 7,62 durante su destino como militar en Mostar y posteriormente la introdujo en España a través de valija. Con el citado arma, el 24 de enero de 2003 acabó con la vida de Juan Francisco L.L., portero del inmueble situado en el número 89 de la calle de Alonso Cano.

El 5 de febrero mató de un disparo a Juan Carlos M.E., joven que se encontraba en una parada de autobús del distrito de Barajas. Junto a él se encontró un naipe que representaba el as de copas.

El mismo 5 de febrero se dirigió a la localidad de Alcalá de Henares entró en el bar 'Rojas', donde ejecutó al camarero del mismo, Mikel J.S., y a una cliente, Juana U.L. Además dejó malherida a la dueña del local y madre de Mikel, Teresa S.G.

En el mes de marzo, Galán se desplazó hasta Tres Cantos, donde, en la Avenida de Viñuelas intentó matar a Eduardo S.E., al que disparó en la cara, y a su acompañante, arrojando a los pies de ambos un dos de copas. Finalmente, el 18 de marzo el ex militar asesinó a un matrimonio rumano que paseaba por un descampado de Arganda del Rey, víctimas que fueron equiparadas con el tres y el cuatro de copas.

CONFESIÓN

Tras cometer estos hechos, el 3 de julio de 2003 Alfredo Galán se personó en la comisaría de Puertollano (Ciudad Real) y confesó ser el autor de la muerte de seis personas, al tiempo que admitió haberlo intentado con otras tres, dando detalles de los acontecimientos que sólo conocían los investigadores.

Contra la sentencia de la Audiencia Provincial interpuso recurso de casación ante el Tribunal Supremo la defensa del procesado argumentando, entre otras cosas, que no se había respetado la presunción de inocencia de su cliente, ya que había sido condenado a pesar de retractarse de su declaración autoinculpatoria y de guardar silencio en la vista oral.

La Sala ha desestimado el recurso al considerar que "el silencio del procesado en ejercicio de un derecho puede ser objeto de valoración cuando el cúmulo de pruebas de cargo reclame una explicación por su parte de los hechos", a la vez que especifica que pese a no declarar "puede deducirse una ratificación del contenido incriminatoria resultante de otras pruebas".

Las acusaciones particulares también interpusieron recurso de casación arguyendo que sus clientes debían ser indemnizados por el Estado porque Alfredo Galán era militar profesional en el momento de ocurrir los hechos. El Supremo también ha rechazado estos recursos porque entiende que el imputado "actuó al margen de su cargo o función", por lo que especifica que la reclamación indemnizatoria de los perjudicados no podrá efectuarse por la vía contencioso-administrativa sino por la penal.

Además, añade que el encausado "no se encontraba en el desempeño de sus obligaciones o servicios" cuando cometió los hechos. Por todos estos motivos, el Tribunal Supremo ha confirmado íntegramente la sentencia de la Audiencia madrileña que penaba a Galán con 142 años y tres meses de prisión, de los que tan sólo cumplirá un máximo de 25.