MADRID, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las unidades de la Guardia Civil que patrullan en aguas de Mauritania conjuntamente con la Gendarmería de este país, en el marco del proyecto denominado Atlantis y destinado al control de la inmigración, interceptaron en la madrugada de hoy cuatro cayucos con un total de 130 inmigrantes irregulares a bordo, que se dirigían hacia las Islas Canarias, según informó el Ministerio del Interior a través de un comunicado.
Desde que el pasado mes de junio se iniciaran las patrullas conjuntas de la embarcación 'Río Duero' y un helicóptero de la Guardia Civil con la Gendarmería Mauritana, tanto en el territorio como en aguas de este país, se ha interceptado a más de 700 inmigrantes irregulares que se dirigían hacia las costas canarias.
El primero de los cayucos interceptados esta madrugada navegaba sobre las 2:00, hora local, a dos millas al sur del puerto de Nouadhibou, con 11 personas a bordo, entre los que se encontraban dos mujeres y dos niños. Todos ellos presentaban buen estado de salud y fueron puestos a disposición de la Gendarmería Mauritana.
Poco después, sobre las 2:45 horas se interceptó el segundo cayuco cuando navegaba a 1,5 millas a oeste del puerto de Nouadhibou. A bordo de la embarcación viajaban ocho inmigrantes, todos ellos hombres, que fueron también puestos a disposición de las autoridades mauritanas.
Los dos cayucos restantes fueron detectados por el helicóptero de la Guardia Civil a unas 100 millas de Cabo Blanco y momentos después fueron interceptados por la patrullera. A bordo de uno de ellos viajaban 90 personas, mientras que en el otro lo hacían 21, todos ellos hombres, que fueron puestos a disposición de las autoridades mauritanas.
Todos los cayucos transportaban bidones de agua y combustible, así como sacos con alimentos para afrontar el largo viaje. También estaban todos dotados de GPS portátiles para orientarse durante el trayecto.
COLABORACIÓN CON MAURITANIA
La embarcación 'Río Duero' zarpó desde Pontevedra con destino a Nouadhibou el pasado mes de mayo con una tripulación de ocho Guardias Civiles y comenzó sus patrullas mixtas con la Gendarmería mauritana a finales de ese mismo mes mismo mes.
Diariamente esta patrullera dispone de una tripulación de cinco Guardias Civiles y cuatro Gendarmes de Mauritania, que realizan de 8 a 10 horas de navegación media y unas 100 millas diarias, en diferentes horarios y en función de las incidencias y necesidades de cada momento.
El 20 de junio se incorporó también un helicóptero de la Guardia Civil con una tripulación total de seis personas, que colabora igualmente en las tareas de control de la inmigración. Asimismo, en el marco del proyecto, la Guardia Civil ha cedido a las autoridades mauritanas cuatro embarcaciones, que fueron recibidas la pasada semana en dicho país.
