MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los vecinos de la calle Fermín Caballero, en el distrito madrileño de Fuencarral, se mostraron muy sorprendidos después de conocer que un hombre de 47 años con problemas psiquiátricos ha matado supuestamente y después trató de suicidarse, ya que, según explicaron, "era tranquilo".
No obstante, alguno de sus vecinos también tenía constancia de que esta persona padecía una enfermedad psiquiátrica y estaba sometida a tratamiento por ello.
Una de las personas que residen en el edificio, María del Pilar, declaró que el hombre "nunca se había mostrado violento con nadie". La vecina afirmó sentirse "alucinada con lo ocurrido" ya que era un "joven tranquilo" que "siempre saludaba" y que "era habitual verle trabajar en su coche todos los días". Las personas del edificio sabían que padecía una enfermedad psiquiátrica y que "estaba en tratamiento".
Otro de los vecinos del edificio, Luis González, declaró "que los padres eran demasiado mayores para controlar su medicación" y consideró al hombre "como una persona abandonada que no contaba con los medios suficientes para seguir una terapia". Según este vecino, "el hijo ayudaba a su padre -que estaba en silla de ruedas- a salir a la calle", por lo que era muy normal verle con sus padres.
El 091 recibió una llamada del SUMMA 112 a las 9.38 horas de este domingo que alertaba de la presencia de un varón "muy agresivo con problemas psiquiátricos" en su domicilio de la calle Fermín Caballero. Al acercarse la patrulla del distrito de Fuencarral descubrieron a un hombre y una mujer muertos y a otro varón con heridas muy graves en cuello y pecho por arma blanca.
Según la Jefe de Guardia del Summa 112, Lourdes Martínez Gil, a su llegada al domicilio encontraron "a los padres ya fallecidos". El hijo, que presentaba numerosas heridas por arma blanca "fue estabilizado en el propio domicilio y, posteriormente, trasladado al Hospital de La Paz, siendo su pronóstico grave".
Las primeras investigaciones oculares del Grupo 10 de Homicidios de Brigada Provincial de la Policía Judicial de Madrid y de la Policía Científica apuntan a que el presunto autor de los hechos, Andrés de 47 años, mató a sus padres, Jorge P.B de 83 años, y Sheila P. B., de 77, y que después se intentó suicidar autolesionándose en cuello y pecho.
