MADRID, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
Manuel García Coego lleva cuatro noches durmiendo en el aeropuerto de Madrid - Barajas esperando encontrar a su perro Trus, desaparecido el pasado 12 de diciembre en uno de los vuelos de la compañía Iberia durante una escala en Madrid.
Hace cuatro días que este pasajero llegó al aeropuerto de la capital buscando a uno de los dos perros que facturó el pasado 12 de diciembre durante un vuelo regular entre La Palma y Santiago de Compostela, vía Madrid, y de los cuales sólo uno llegó a su destino.
Los primeros días de búsqueda, Manolo recibió "autorización" del aeropuerto para salir del perímetro. Reconoció que en un principio "se portaron muy educadamente" con él pero, a pesar de ello, aseguró sentirse "muy defraudado" porque no ha encontrado apoyo por su parte para solucionar un problema que la compañía tiene con él.
García afirmó que pagó por el transporte de los animales la tarifa que Iberia tiene establecida. "Estás esperando una calidad de servicio por el precio que pagas por ello", defendió.
Asimismo, se quejó de que un perro "no es una caja de cartón" e insistió en que perder un animal vivo "no es igual" que perder una maleta. "Tendrían que estar más implicados", argumentó. Después de estos días sin recibir respuestas, lo único que solicita ahora a la compañía es "un espacio" para dejar las dos bolsas que lleva como equipaje.
El dueño desconoce por qué pudo perderse su mascota pero tan sólo espera que esta situación pase pronto y "recuperar" a su perro para volver a casa con Trus y Kia. "Son mi familia, es lo que tengo", concluyó.
