MADRID, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
"Lo probé una vez y me enganché". Así comenzaba una pequeña entrevista que aparecía en un conocido periódico, pero ¡no!, en este caso no versaba sobre las redes sociales, juegos online, consumo de tóxicos... El motivo de enganche había sido participar como voluntaria en una asociación de discapacidad intelectual.
El pasado viernes, 5 de diciembre se celebró el Día Internacional del Voluntariado, con el eslogan. "Cambia el mundo. ¡Hazte voluntari@!"
Desde 1985, la Asamblea General de las Naciones Unidas invitó a los gobiernos a establecer este día para fomentar la conciencia social de lo que aportan los voluntarios. Es un momento de reconocimiento a aquellos que son y un impulso para los que quieren ser. This is the question.
El voluntariado es un comportamiento a favor de la sociedad, que beneficia a otras personas y se encuentra dentro del contexto de una organización. En la actualidad, millones de personas en todo el mundo colaboran participando en actividades altruistas. En Europa un 32,1% realiza algún tipo de trabajo voluntario y en concreto en España, según el CIS, el 17% de la población han participado en el último año en este tipo de actividades.
Existen muchas formas para ser voluntario, desde marcharte a otro país a trabajar, hacer algo en tu propia ciudad o contribuir económicamente con alguna asociación u ONG. Entre todos "podemos dejar el mundo un poquito mejor de lo que lo hemos encontrado".
De la misma manera, las experiencias personales y los procesos psicológicos que motivan y sostienen a los voluntarios también forman un amplio abanico.
Se producen experiencias de choque cultural, de promover una transformación interior en la persona, cambio de valores, planteamientos de realizar pequeños cambios en el estilo de vida, o por el contrario incumplimiento de las expectativas, intentos de salir del día a día, frustraciones, enfados con la organización
¿POR QUÉ HACERME VOLUNTARIO?
En cuanto al porqué hacerme voluntario podemos encontrar muchos testimonios que reflejan el bienestar que produce. Podemos hacer una división entre el 'bienestar hedónico o subjetivo' relacionado con la felicidad, entendida como sensación de satisfacción global con mi vida, teniendo un componente cognitivo y afectivo.
Por otro lado, está el 'bienestar eudaimónico o psicológico' que tiene que ver con el contenido de mi vida y vivir bien. Algunos de los factores que determinan ese bienestar psicológico son: dónde vivo, mis rasgos de personalidad, la autoestima, el sentido de autocontrol, la capacidad de afrontar el sufrimiento que tengo, las aspiraciones y metas.
¿QUÉ ME PUEDE APORTAR SER VOLUNTARIO?
1. Me ayuda a conocerme en mis relaciones con los demás.
2. Ahondar en mi identidad: ¿qué me mueve y me gusta?
3. Me enseña a confrontar mis problemas con los de los otros, promoviendo la actitud de "humanidad compartida".
4. Me prepara para afrontar duelos y pequeñas pérdidas.
5. Fomenta mi capacidad de interpretar las creencias, sentimientos, actitudes, deseos, que subyacen a la conducta de mí mismo y del otro, lo que se conoce como mentalización.
¿CÓMO EXAMINAR NUESTRA INTENCIÓN?
Existen algunas actitudes que nos sorprenden y aprovechando esta fecha podemos preguntarnos:
- ¿Quién no ha tenido un amigo que se ha ido fuera y ha llenado sus redes sociales de fotos de su voluntariado?
-¿Por qué existe esa necesidad de dar a conocer lo que has estado haciendo? ¿Esta actitud proviene de una necesidad de que me reconozcan, de que me aplaudan? ¿Es por el contrario una forma de sensibilizar a mis amigos para que conozcan estos proyectos y ayuden con colaboraciones económicas?
- ¿Me ayuda a expresar lo vivido y a compartir cómo me encuentro a la vuelta?
CONSEJOS PARA APROVECHAR LA EXPÈRIENCIA
1. Necesito conocer el proyecto, su filosofía y lo que me piden como voluntario.
2.La huída de una situación difícil que esté atravesando no es un buen compañero de viaje. Mis problemas personales y familiares, los llevo en mi mochila.
3. Intenta que los motivos para colaborar sean intrínsecos (experiencia interna), no ajenos a mi persona (me apunto porque queda bien, porque está en mi lista de cosas para "ser buena persona", porque así lo puedo poner en el currículum)
4. Piensa dónde te sitúas en el voluntariado: ¿desde arriba? Voy a ayudar al que está en una situación difícil o ¿desde igual a igual? Vamos a recorrer juntos este camino.
Recuerda siempre que como dijo el zorro al Principito: "Fue el tiempo que pasaste con tu rosa lo que la hizo tan importante". ¡Elige dónde quieres invertir tu tiempo!
Sonia Mestre Roldán
Neuropsicóloga
www.doctorcarloschiclana.com
