BARCELONA, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra desalojaron desde las 16 horas y durante unas tres horas el recinto fabril de Can Ricart, en el Poblenou de Barcelona, donde se encontraban los 'okupas' de la Makabra. Los agentes tienen la autorización del Juzgado de Instrucción número 27 de Barcelona, que considera que la "invasión usurpatoria" de las instalaciones se realizó con "violencia e intimidación".
Mientras duraba el desalojo, con decenas de furgones de la Policía catalana, los trabajadores de Can Ricart seguían en sus puestos de trabajo desarrollando su actividad, si bien había cierta expectativa sobre lo que estaba pasando.
Precisamente a las 16 horas de hoy estaba previsto que se llevara a cabo el primer ensayo de circo de los 'okupas' en Can Ricart y para el fin de semana tenían preparada toda una agenda de actos diversos. Una treintena de simpatizantes y amigos se aproximaron hasta el recinto para apoyar a los 'okupas' y, cada vez que salía uno de ellos, les animaban y aplaudían.
Desde una zona vallada, ya que no estaba permitido el acceso al recinto, los compañeros de los 'okupas' increpaban y gritaban a los Mossos y organizaban actos musicales espontáneos con palos y cacerolas.
El desalojo, que se produjo sin incidentes y de forma pacífica, duró varias horas. Los 'okupas' salían con carritos de la compra, mochilas y, sobre todo, decenas de colchonetas. Según datos de los Mossos, en el interior de Can Ricart había 39 'okupas', de los que ocho no llevaban consigo documentos que les identificasen, por lo que fueron trasladados a comisaría.
LOS VECINOS LO CONSIDERAN "DESPROPORCIONADO".
El presidente de la asociación de vecinos de Poblenou, Manel Andreu, consideró que "el desalojo es desproporcionado por completo" y aseguró que fue inesperado. Andreu mostró su preocupación por el hecho de que ocurra algo parecido al desalojo de La Makabra y que "traigan excavadoras y derriben las naves, cuando Can Ricart es un recinto protegido".
El abogado de los 'okupas' de La Makabra, Antoni Lucchetti, afirmó que el desalojo fue "inesperado", si bien sabían que "era una posibilidad". Lucchetti explicó que pudo comunicarse por teléfono con los afectados y aseguró que "están tranquilos".
El abogado protestó por el hecho de que, según indicó, los Mossos no le permitieron entrar al recinto para hablar con sus representados y presenciar los hechos, lo que consideró una "irregularidad". Por ello, ahora estudiarán si presentan algún tipo de denuncia por el desalojo.
Por su parte, otra abogada del colectivo 'okupa', Làia Serra, explicó que estas semanas intentaron personarse en la causa sobre la protección de Can Ricart y no pudieron formalizar su petición. Serra tampoco pudo entrar a Can Ricart y consideró que la medida es "impertinente".
Can Ricart fue ocupado el pasado 2 de diciembre por los miembros del colectivo La Makabra, que anteriormente habían sido desalojados de la antigua fábrica que ocupaban en el distrito barcelonés de Sant Martí, a la que asiduamente acudían entre 700 y 800 personas a cursos y espectáculos de circo, teatro, títeres y danzas, entre otras actividades.
La decisión del juez llega después de que él mismo denegase el pasado 3 de diciembre el desalojo inmediato de Can Ricart al entender que no existían razones para adoptar una medida cautelar urgente. Pese a que tenían de plazo hasta el próximo 23 de diciembre, los Mossos d'Esquadra empezaron a hacer efectiva la orden judicial de desalojo poco antes de las 16 horas de hoy.
