Condenado a cinco años y medio por disparar a su mujer al reprocharle ésta su estado de embriaguez

Actualizado: sábado, 1 marzo 2008 11:40


ALMERÍA, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial ha condenado cinco años y seis meses de prisión a un hombre de 53 años, vecino de Níjar (Almería), que, en 2006, disparó en dos ocasiones contra su mujer después de que ésta le recriminase que hubiese regresado ebrio al domicilio familiar ubicado en El Cortijo 'Las Palmas'.

La sentencia de la Sección Tercera, a la que tuvo acceso Europa Press, considera al acusado autor de un delito de homicidio en grado de tentativa por el que el Ministerio Fiscal solicitó seis años de cárcel al computar la circunstancia agravante mixta de parentesco, que el tribunal compensa con la atenuante analógica de embriaguez.

El fallo no fija para la mujer, quien contrajo matrimonio hace 34 años con su agresor, indemnización alguna ya que ésta pidió de manera expresa durante el acto de juicio oral la no condena de su marido, al que aseguró "haber perdonado" y con el que ha retomado la relación conyugal con visitas periódicas al centro penitenciario provincial de El Acebuche, donde permanece ingresado en prisión provisional.

El tribunal atribuye al hombre, sin embargo, la intención de "causar la muerte a su esposa", que fundamenta en el testimonio ante la sala de una de las hijas del matrimonio, primera en acudir al lugar de los hechos cuando se oyeron los disparos y a la que el padre explicó en ese momento que "había matado a su madre".

Según consta en el apartado de hechos probados, el acusado mantuvo una disputa con su cónyuge que se originó tras los reproches de la mujer "por la propensión" de él a la ingesta de bebidas alcohólicas y que ya había sido motivo de enfrentamiento entre ambos en numerosas ocasiones durante los últimos años de relación.

Tras rociar a la mujer con una manguera y una vez ésta regresó del cuarto de baño de la vivienda, donde procedió a cambiarse de ropa, el condenado, empuñando una escopeta de caza del calibre doce, le amenazó al grito de "eres una puta y te tengo que matar, yo iré a la cárcel pero tú vas a ir al cementerio".

A continuación, y sin constar que tuviese notablemente disminuidas sus facultades intelectivas y volitivas por el consumo de gran cantidad de la vino a lo largo del día, disparó contra ella con cartuchos de perdigones mientras exclamaba "ahora verás".

La víctima consiguió protegerse tras la puerta que comunicaba la cocina con el patio del inmueble pese a lo que sufrió lesiones a causa del impactó de algunos de perdigones en su cuerpo y de las esquirlas de madera derivadas de la rotura del marco y la hoja.

Sufrió "múltiples heridas punzantes superficiales" en el antebrazo derecho, ambas manos y mama derecha por las que precisó asistencia médica y de las que tardó en sanar ocho días, tres de los cuales estuvo incapacitada para sus ocupaciones habituales.