Su mujer participa en la misión junto a otras 12 personas en Dakar
BARCELONA, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, afirmó hoy en una declaración institucional que el secuestro de tres cooperantes catalanes ayer en Mauritania de la ONG Barcelona Acció Solidària ha sido un golpe "muy duro", aunque dijo que esto no pone en cuestión sus políticas de cooperación ni cortarán la voluntad solidaria de la ciudad, porque es la "expresión más genuina" de Barcelona.
Según Hereu, la ciudad entera está al lado de Albert Vilalta, Roque Pascual y Alicia Gámez y de sus familias, y el ayuntamiento está trabajando "codo con codo" con el resto de autoridades para obtener un desenlace favorable. Para él, los cooperantes representan lo mejor de Barcelona y que no estarán solos.
El alcalde confirmó que 53 personas iban en la caravana: 32 de ellas en el convoy asaltado; 14 en Dakar (Senegal), entre las que se encuentra su mujer y el delegado de Presidencia del consistorio, Ignasi Cardelús; y siete en Kakhla (Marruecos). Dijo que el resto de integrantes del convoy asaltado se encuentran bien, bajo protección de la embajada y la policía mauritana en Nuakchot.
Hereu confirmó también que en la caravana también había algunos trabajadores municipales. Entre ellos Toni Camps, coordinador de la caravana en Mauritania y del Área de Deportes municipal; Josep Carbonell, presidente de Barcelona Acció Solidària e integrante del Área de Medio Ambiente; Montserrat Bou y Núria Molina, personal sanitario de Bomberos; Joan Manuel Toribio, bombero jubilado, y Susana Vega e Ignasi Lorente, de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB).
