SANTA CRUZ DE TENERIFE, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil del puesto de Playa de las Américas, en el sur de Tenerife, detuvo ayer a cuatro varones de 32 años, de 27, de 16 y 17, acusados de la comisión de nueve robos con fuerza en las cosas.
Según informó el cuerpo armado, los retenidos actuaban, de común acuerdo y de forma organizada, en los términos municipales de Granadilla de Abona y Arona. En ese primer término municipal cometieron cuatro robos; dos en domicilios y otros dos en locales comerciales. Asimismo, en Arona se les imputan cinco delitos de robo; cuatro en diferentes domicilios y uno en un local comercial.
En total habían sustraído 700 euros en efectivo, un cajón portamonedas, bollería, joyas, relojería, una cámara fotográfica, un ordenador portátil, dos teléfonos móviles, una CPU, un cajón de una caja registradora y unas 30 gafas de óptica. Además los daños efectuados para cometer los robos ascienden a 5.000 euros.
De todos estos efectos ya se ha recuperado parte, según informó la Guardia Civil. Los hechos venían ocurriendo desde hace unos dos meses y habían creado una gran alarma social en el municipio de Arona. A través de las investigaciones se pudo saber que uno de los implicados había salido recientemente de prisión. Con esta operación se da por desarticulada la banda juvenil.
OTRA BANDA EN EL NORTE
De igual forma, el cuerpo armado también informó de que en la Orotava ha detenido en La Orotava a tres personas --un joven de 24 años, vecino de La Laguna, y dos menores, una joven de 16 años y un joven de 15, ambos vecinos de Santa Cruz--, como presuntos autores de un delito de robo con fuerza en las cosas. Los detenidos sustrajeron de un centro comercial ubicado en el municipio diversas cámaras fotográficas valoradas en 1.200 euros, habiendo anulado para ello los sistemas de alarma.
Por último, en Granadilla de Abona la Guardia Civil también detuvo a un hombre, de 33 años, como presunto autor de un delito de defraudación de línea telefónica. El hombre enganchó la línea telefónica particular de su domicilio a la de una empresa de telefonía de la zona en San Isidro, con la ayuda de un trabajador, que está supuestamente implicado también en el hecho delictivo, con el objeto de no abonar sus servicios, defraudando así a dicha empresa.
