Desarticulan en Barcelona un clan gitano dedicado al tráfico de droga y armas

Actualizado: martes, 22 julio 2008 15:11

   BARCELONA, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Cuerpo Nacional de Policía (CNP) ha dado un importante golpe a un conocido clan gitano que presuntamente se dedicaba al tráfico de armas y de estupefacientes en los barrios de Casa Antúnez y Zona Franca de Barcelona, y al blanqueo de capitales. "Es la primera vez que se ataca la estructura financiera de este clan", indicó hoy el inspector Rafael Jiménez.

   En la operación, la Policía ha detenido a 23 personas y se ha incautado de 25 armas de fuego largas y cortas, así como una granada de mano, "ingente munición", varias armas blancas --como machetes, catanas y espadas-- y una defensa eléctrica, que estaban escondidas en una pared falsa.

   En una rueda de prensa, los responsables de la operación explicaron que en noviembre iniciaron una investigación a raíz de las informaciones sobre la posibilidad de que el clan Jodorovich se dedicara a la venta de droga en la zona y las sospechas de que igualmente traficaban con armas de guerra.

   Sin embargo, la Policía no se limitó a investigar esos dos presuntos delitos, sino que quiso recabar pruebas sobre el blanqueo de dinero porque "la forma más efectiva" de atacar una organización de estas características es "atacar su estructura financiera", explicó el inspector.

   "Les ha hecho daño donde más les duele a este tipo de organizaciones" porque "les es más difícil recomponerse" de la pérdida de los beneficios obtenidos ilícitamente durante años, sentenció Jiménez.

   Con todo, la madrugada del 27 de junio, más de 150 agentes se desplazaron a la zona y para realizar 18 registros simultáneos. Durante la operación, se detuvieron 23 personas --14 del clan Jodorovich-- y se incautaron del gran arsenal de armas.

   El hallazgo de las armas fue descubierto "aunque parezca una historia poco creíble, gracias al olfato de un policía al que no le cuadraba la estructura de la cocina", explicó Jiménez, quien reconoció que "en ningún momento" esperaban encontrar tantas armas. El inspector informó que las armas se hallaban en una pared doble "perfectamente camuflada".

   También se intervinieron más de 237.000 euros en efectivo del domicilio del patriarca, casi dos kilos de cocaína, 12 vehículos y diversos relojes de gama alta, así como un certificado de compra de un caballo de raza y documentación que permite relacionar al principal dirigente con el resto de detenidos.

   Asimismo, se han inmovilizado unas 30 cuentas corrientes de 22 entidades bancarias y el titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Barcelona ha impuesto la prohibición de transmisibilidad, enajenación y gravamen de 34 propiedades, de las que el valor de solo dos ya superaba el millón de euros.

   Además, se registraron una oficina financiera --cuyo director fue detenido--, un despacho de abogados y consultores --cuyos dos responsables también fueron arrestados-- y varias gestorías, "sectores sensibles de la sociedad económica que se había creado", según la Policía.

   Allí se encontraron depósitos bancarios a nombre de varios integrantes del clan y de "sociedades pantallas", documentación societaria e información sobre "dudosas" operaciones de compra-venta de inmuebles por valor de cuatro millones de euros.

   Según el responsable de delincuencia económica, Francisco Yuvero, se trata de una "organización de manual" porque "trataban de maquillar" el dinero que obtenían de la venta de estupefacientes a través de entidades societarias y testaferros para evitar que pudieran relacionarlos con las propiedades.

   La Policía espera que las pruebas recabadas permitan demostrar la relación de los beneficios ilícitos que obtenían a través del tráfico de drogas y de armas de guerra --que algunas eran utilizadas para defender el negocio--, con el blanqueo de capitales.

   De los detenidos, tres --el patriarca, A.M.J., su hijo y mano derecha, S.M.J., y el hombre que guardaba las armas-- han ingresado en prisión preventiva acusados de un delito contra la salud pública, de tráfico de armas de guerra y de blanqueo de capitales. También se imputa este último delito a las otras 20 personas, que quedaron en libertad provisional con cargos.

   El CNP informó que algunos de los detenidos ya habían sido arrestados y que, incluso, varios de ellos están pendientes de resoluciones del Tribunal Supremo (TS).