Detenido un clan familiar acusado de 30 robos en hoteles de Madrid, Cuenca, Toledo y Valencia

Actualizado: lunes, 25 enero 2010 12:23

MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -

Agentes de Policía Nacional han detenido a los miembros de un clan familiar a los que se les imputan 30 robos con fuerza en hoteles del centro de Madrid y en las ciudades de Cuenca, Toledo y Valencia, informó hoy la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.

Los delincuentes pertenecen a un grupo perfectamente organizado y estructurado que vigilaba muy bien los establecimientos para así conocer sus medidas de seguridad. Seguían muy de cerca los movimientos de los empleados y, a cada golpe, le dedicaban tiempo y preparación.

La investigación comenzaba en el mes de octubre. Un aumento de las denuncias por robo en hoteles del centro de Madrid puso en alerta a los investigadores del Grupo de Policía Judicial de dicha comisaría. Del análisis de las denuncias se desprendió que los autores entraban a robar en aquellas habitaciones que estaban vacías bien mediante palanqueta o con la llave metálica sustraída previamente a su titular. Una vez en el interior de la habitación, se apoderaban de todo lo que podían: dinero, tarjetas, joyas, ordenadores portátiles, reproductores de música y cualquier objeto de electrónica. En alguna ocasión incluso sustrajeron la caja de seguridad con todo su contenido.

CLAN FAMILIAR MUY ORGANIZADO

Fruto de las investigaciones, los agentes confirmaron que estaban ante una banda organizada que estudiaba minuciosamente los hoteles antes de cometer los robos, y que llegaban a conocer perfectamente la actividad rutinaria del establecimiento escogido para dar el golpe.

Poco a poco fueron estrechando el cerco y así averiguaron que los delincuentes, además de estar muy bien organizados, pertenecían todos a un mismo clan familiar de origen chileno, auténticos especialistas en los robos en establecimientos.

Después de varias semanas de intensas gestiones, los investigadores localizaron el escondite de la banda, un domicilio ubicado en el madrileño barrio de Santa Eugenia. A mediados de la semana pasada conseguían arrestarlos. Con el preceptivo mandamiento de entrada y registro judicial, los agentes registraron toda la vivienda e intervinieron multitud de efectos. Muchos de ellos procedían de robos denunciados y otros de los que habrá que determinar su procedencia.

Los detenidos, un matrimonio y sus dos hijos de 25 y 19 años, ya han pasado a disposición judicial. Alejandro, el cabecilla, cuenta con más de una decena por antecedentes similares y otros por delito contra la seguridad del tráfico y por infracción de la ley de extranjería. Además tenía pendiente cinco requisitorias por robo con fuerza en Madrid, Toledo, Cuenca y Valencia.

Entre los efectos intervenidos se encuentran cámaras fotográficas y de vídeo, teléfonos móviles, ipods, consolas de videojuegos, bolsos de piel, gafas de sol, carteras de piel, relojes de conocidas marcas, tres ordenadores portátiles, 600 euros en efectivo y hasta décimos de la Lotería Nacional.