Detenidos dos hombres acusados de estafar 240.000 euros con el método de los 'billetes tintados' en Barcelona

Actualizado: sábado, 22 marzo 2008 16:27


BARCELONA, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los Mossos d'Esquadra han detenido en Girona a dos cameruneses acusados de estafar 240.000 euros a dos hombres en Girona a través del método de los 'billetes tintados', que consiste en vender un producto que supuestamente duplica billetes de curso legal, según informó la Policía catalana.

Varios agentes de ese cuerpo policial arrestaron 'in fraganti' el miércoles a los ciudadanos cameruneses Edmound D.K. y Roosevelt K.M., ambos de 30 años y vecinos de Salt (Girona), cuando intentaban convencer a una de las víctimas de que les entregara más dinero, aunque el afectado ya había alertado a la Policía catalana.

Hace unos días, uno de los detenidos, Roosevelt K.M., y otro hombre que no ha sido identificado propusieron a dos personas participar en una operación para poner en circulación una serie de billetes que habían tintado para traerlos de forma fraudulenta desde África.

Los estafadores explicaron a sus víctimas que para que los billetes tintados recuperasen su aspecto original era necesario que estuvieran envueltos en papel de aluminio junto a billetes normales y un líquido especial. El paquete debía estar bajo un peso durante un rato y después colocarlo en agua caliente para que desapareciera el tinte.

Para convencer a sus víctimas, los estafadores realizaban una demostración y les daban un par de billetes para que confirmaran su autenticidad en una entidad bancaria. En esa ocasión, todos los billetes utilizados eran auténticos.

Uno de los afectados entregó 40.000 euros a Roosevelt K.M. y su compañero que no ha sido identificado. Los investigadores sospechan que uno de ellos cambió el paquete con el dinero por otro de igual aspecto cuando salió de la habitación para comprobar el estado del envoltorio.

Al día siguiente, cuando abrieron el paquete, los billetes tenía una tonalidad rojiza, un problema que podía solucionarse con un costoso líquido que sólo podía adquirirse en el extranjero, según explicó el delincuente, que así tenía una segunda oportunidad para estafar más dinero a la víctima.

En el otro caso, la víctima entregó 200.000 euros. Esta vez, los estafadores no se presentaron al día siguiente, cuando habían quedado con el inversor para entregarle el dinero.