LANGREO, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
El municipio asturiano de Langreo, en el cual residía Patricia Fernández Guzmán, vivió hoy una mañana de conmoción al conocer la noticia del hallazgo del cuerpo calcinado de la joven, la pasada jornada del viernes, en una escombrera próxima al pozo minero de Samuño, en Ciaño.
Conocidos de Patricia y extraños lamentaban el suceso y manifestaban su "perplejidad" por el estado en que se había encontrado el cuerpo, "prácticamente calcinado", según confirmaron a Europa Press fuentes cercanas a la investigación.
La joven fallecida, de 22 años de edad, residía en la calle Torre de los Reyes de Sama, en el domicilio familiar y faltaba de su casa desde hacía dos días, por lo que la familia había presentado ayer la denuncia de su desaparición.
En el entorno de su residencia los vecinos trasladaban su "conmoción" por el hecho. También en las localidades langreanas de La Cortina y Lada, de donde era natural la familia de Patricia, manifestaron hoy su "perplejidad" por la muerte de la joven, de quien decían "era una bendita que nunca estaba malhumorada".
En la peluquería en la que trabajaba Patricia Fernández Guzmán, que hoy permanecía cerrada con un cartel en la puerta que indicaba "cerrado por defunción", ninguna de sus compañeras quiso hacer declaraciones. Tampoco se ha realizado manifestación alguna, por el momento, desde el Ayuntamiento de Langreo.
